SANTIAGO, 1 jul (Xinhua) -- La presidenta Michelle Bachelet concluyó esta noche su visita oficial a Estados Unidos con un discurso ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), en Washington.
Esta fue primera visita oficial a este país desde que tomó posesión el pasado 11 de marzo para un segundo mandato y fue recibida por el presidente Barack Obama y ambos gobiernos suscribieron un conjunto de acuerdos económicos, energéticos y educacionales, todo lo cual indica lo óptimas que están las relaciones bilaterales.
Antes de pronunciar su discurso en la OEA, sostuvo una reunión con el secretario general del organismo, el chileno José Miguel Insulza.
"Las Américas están cambiando aceleradamente. Por eso, debemos ser capaces de actualizar los objetivos permanentes de esta organización y de nuestras relaciones regionales, de cara a las nuevas realidades hemisféricas", afirmó Bachelet.
Subrayó que este escenario surgió "luego de años sombríos de dictaduras, cuando conquistamos con esfuerzo nuestras democracias políticas y reivindicamos el derecho a la justicia, la integridad, la libertad y un conjunto de reivindicaciones esenciales".
Dijo que la democracia ha favorecido positivamente a la región: reduciendo la pobreza y creando oportunidades a sus habitantes.
"Estos cambios han creado ciudadanos más conscientes. Ciudadanos críticos e informados que hoy exigen más de sus autoridades y de sus sociedades. Exigen mayores niveles de bienestar, más oportunidades, más derechos y más libertades. Exigen mayor incidencia en las decisiones nacionales", apuntó.
Añadió que hoy la región de América Latina y el Caribe está marcada por cambios sociales, y que Chile, luego de 20 años de progreso, su gobierno impulsa reformas "que buscan potenciar las posibilidades de crecimiento sostenido. Nuestro país promueve una estrategia de convergencia en la diversidad".
"Hablamos de reformas en lo social, en lo económico y en lo político, que aseguren las condiciones de cohesión social e inversión en crecimiento y productividad que nos permitan acceder a un desarrollo pleno, inclusivo y sustentable", aseguró.
Explicó la propuesta de una reforma estructural a la educación en todos sus niveles y una reforma al sistema tributario, para disponer responsablemente de los recursos que requerirá la primera medida y anunció un proceso participativo, democrático e institucional de cambio de la Constitución del país.
Reconoció la labor de Inzulza, quien concluye su mandato el próximo año al frente de la OEA, señalando que "su mirada representa el desafío que tenemos para fortalecer el multilateralismo y la colaboración entre los estados".
Finalmente, expresó su preocupación frente a los problemas que enfrenta Argentina en la renegociación de su deuda soberana", y dijo que "no podemos permitir que agentes especulativos pongan en riesgo los acuerdos alcanzados entre deudores y acreedores, afectando la estabilidad financiera global".
La agenda de Bachelet incluyó una cita con el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim y otra con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, donde explicó las prioridades políticas y económicas de su gobierno y los objetivos de las reformas en materia tributaria y educacional.
Bachelet fue recibida también en la Cámara de Comercio de Estados Unidos, donde reiteró que su gobierno busca mejorar la calidad de la educación, ampliar la participación democrática y elevar la productividad y el crecimiento del país.