Yaofei junto a la cantante cubana Omara Portuondo, la Diva del Buena Vista Social Club. (Foto: Casa de David)
Pueblo en Línea: ¿En el 2004?
David: Antes. Todo comenzó en el 2003. En la televisión china tenía un programa habitual en que yo enseñaba a bailar salsa y otros ritmos, por eso muchas personas empezaron a familiarizarse con este mundo. A pesar de que bailaba bien, yo no estaba satisfecho con mi técnica, pensaba que no bailaba lo suficiente suelto, lo suficientemente cubano. Esa etapa concluye cuando decidí terminar con el programa de televisión y parar las clases para irme a Cuba. Necesitaba aprender "en el terreno" la música y los bailes tradicionales.
Pueblo en Línea: ¿Fue tu primer viaje a Cuba?
David: Sí, fue la primera vez. Me acompañó mi hermana, que también ahora es una tremenda bailadora de salsa y casinera. En ese primer viaje llegamos a La Habana, pero fue un viaje corto. Pudimos tomar clases con con algunos maestros. Un mes pasa volando. Lo importante de ese viaje inicial fue que pude conocer Cuba, la cultura cubana y la expresión del cubano. Después de volver a Pekín, echaba de menos a Cuba todos los días. Entonces llegó diciembre y el fin del año de ese mismo 2003 regresé a Cuba otra vez y me quedé allí un largo tiempo. Viví en la embajada de China y en el Instituto Superior de Arte. En la facultad de danza, al principio, no habían clases de salsa porque todos los cubanos saben, más o menos, cómo bailar salsa. Es algo popular, que no aprende en una escuela. Entendí que tenía un largo camino por delante. Por supuesto, no sólo estudié en la academia, cada noche aprendía en la calle con cubanos, con la gente que disfruta bailar en La Habana, con los bailadores del malecón y de La Tropical.