BEIJING, 3 nov (Xinhua) -- Las organizaciones y miembros del Partido Comunista de China (PCCh) deben acatar la Constitución y las leyes de China, así como las normas y las regulaciones del partido para garantizar que el sistema legal del país continúe mejorando, dijo hoy un alto funcionario de lucha contra la corrupción nacional.
El secretario de la Comisión Central de Control Disciplinario (CCCD) del PCCh, Wang Qishan, dijo que la Constitución y el sistema legal del país son elementos integrales para impulsar al Partido, y que en especial los líderes del Partido deben poner un ejemplo admirable para el resto de la sociedad.
La cuarta sesión plenaria del XVIII Comité Central del PCCh, realizada a finales de octubre, avanzó para promover integralmente el Estado de derecho en China.
Wang emitió los puntos de vista en un artículo publicado por el órgano de difusión del partido, el Diario del Pueblo. El liderazgo del Partido y Estado de derecho socialista se sostienen mutuamente.
El Partido debe traducir sus directrices y políticas a través del procedimiento legal, haciendo que las leyes y las regulaciones sean cumplidas por todos.
Wang dijo que el PCCh debe ser manejado a través de sus regulaciones y disciplinas internas, ante todo, por los estatutos del Partido.
Las regulaciones y disciplinas del Partido imponen más restricciones a los miembros del Partido que la ley común a los ciudadanos normales, ya que ser miembro del PCCh significa ceder algunos derechos y libertades de las que goza el público en general.
Los miembros del Partido que violen sus reglas deben ser inspeccionados y sancionados por el Partido, subrayó. La dirección del Partido requiere severidad, por lo que los departamentos de control disciplinario de todos los niveles deben reforzar la supervisión y encargarse rápidamente de las violaciones.
El Partido no puede permitirse perder la lucha contra la corrupción, aunque subrayó que será un proceso largo, complicado y arduo.
Las sugerencias de Wang incluyen el fortalecimiento del control disciplinario y las sanciones para evitar la corrupción entre funcionarios; desarrollar mejores sistemas de selección y de supervisión, y el desarrollo constante del fomento del espíritu partidista.
Además, sugirió que los elementos de la cultura tradicional china, como gobernar al país con su código moral, pueden apoyar las leyes y las regulaciones.