El número de muertos en accidentes de tránsito en Brasil se redujo un 9,6 por ciento en 2013, con 40.500 víctimas fatales en las carreteras, ante las 44.812 que hubo en 2012, informó hoy el Gobierno.
Según un estudio divulgado por el Ministerio de Salud este jueves durante un seminario de seguridad vial en Brasilia, los muertos en accidentes de carretera en Brasil en 2013 bajaron por primera vez tras tres años de aumento.
En las carreteras federales, hubo una reducción por segundo año seguido de muertos, heridos y accidentes, según la Policía de Carreteras Federal. Mientras que la mortalidad se redujo un 10,1 por ciento, los heridos lo hicieron en un 8,3 por ciento y los accidentes en un 6,4 por ciento.
El descenso fue atribuido por la policía a un endurecimiento de la legislación, a la inversión en tecnología y a más recursos en fiscalización.
Por su parte, el ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, dijo que la caída de las víctimas mortales es una "excelente" noticia para el país, teniendo en cuenta que el aumento de la flota de vehículos pasó de los 24 millones en 1998 a los 85 millones el año pasado.
No obstante, Cardozo admitió que "aún estamos lejos de los que nos gustaría, pero tenemos la seguridad de que estamos en el camino cierto", dijo.
Uno de los factores atribuidos por los realizadores del estudio es la aplicación de la Ley Seca, en la que no se permite que los conductores hayan consumido ningún tipo de bebida alcohólica bajo pena de multa.
Según la Policía de Carreteras Federal, en 2013 se hicieron 1.523.334 pruebas de alcoholemia en las carreteras federales, un 135 por ciento más que en 2012, de los que 38.847 casos acabaron en multa y 11.868 detenidos.
Según el Ministerio de Salud, Brasil ocupa el quinto lugar en el ránking mundial de mortalidad en el tránsito, con 20 muertos por cada 100.000 habitantes, apenas por detrás de India, China, Estados Unidos y Rusia, pero muy por encima de la media europea, de ocho fallecidos por cada 100.000 habitantes.
Junto a los primeros cinco colocados, Irán, México, Indonesia, Sudáfrica y Egipto representan el 62 por ciento de la mortalidad por accidentes de tránsito en el mundo.
El costo social de los accidentes ocurridos en las carreteras federales brasileñas entre 2011 y 2013 ultrapasó los 30.000 millones de reales (unos 11.500 millones de dólares).