BRUSELAS, 27 ago (Xinhua) -- La cuestión migratoria encabezará la agenda de la cumbre de los Balcanes occidentales en Viena debido a que la región enfrenta un número sin precedentes de migrantes, indicaron hoy medios locales.
Los primeros ministros de seis países de los Balcanes occidentales, además de Alemania, Francia, Italia, Croacia y Eslovenia, fueron invitados al evento.
La cumbre de hoy buscará desarrollar aún más la cooperación entre los países para abordar sus desafíos comunes.
Está previsto que la migración domine la cumbre de los Balcanes occidentales en la que altos funcionarios de la comisión, ministros de Relaciones Exteriores y líderes se reunirán en Viena, informó el EU Observer, un diario en línea con sede en Bruselas.
Europa enfrenta dificultades para abordar la peor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial con una alta afluencia de personas que buscan refugio dentro de sus fronteras.
Alrededor de 237.000 migrantes han llegado a Europa por mar este año, la mayoría de los cuales ha desembarcado en Italia y Grecia. Más de 2.300 migrantes han muerto durante la travesía, informó la Organización Internacional para las Migraciones.
Los sirios representan una tercera parte de los migrantes que cruzaron el Mediterráneo para llegar a Europa durante la primera mitad de 2015.
La agencia fronteriza de la Unión Europea (Frontex) señaló que la región de los Balcanes occidentales se ha convertido en una zona de tránsito de migrantes indocumentados procedentes de Grecia luego de la introducción de los viajes libres de visa dentro de la Unión Europea.
Desde los Estados miembros de la región, los migrantes huyen para dirigirse a otros países del bloque, en particular a Austria y Alemania, donde solicitan asilo.
Tan sólo en julio, 35.000 migrantes llegaron a Hungría, lo que significa que el país se unirá a Italia y Grecia como los Estados miembros de la Unión Europea más expuestos en la frontera del bloque.
En un esfuerzo para contener la afluencia, el gobierno húngaro decidió construir una valla a lo largo de la frontera entre Hungría y Serbia.
Ante esta situación, las autoridades macedonias declararon el jueves pasado un "estado de excepción" en su frontera sureña y norteña y enviaron policías y fuerzas armadas para controlar la creciente afluencia y tránsito de migrantes.
El número de migrantes que están intentando llegar a Europa sigue aumentando como resultado del creciente conflicto en Siria y parece no tener fin. Más de cuatro millones de sirios han huido de la guerra civil para convertirse en refugiados en la región circundante.
La migración causa serios problemas a los países balcánicos, la mayoría de los cuales no tiene los recursos ni las instalaciones para alojar a tan enormes números de migrantes.
Antes de la cumbre, la Comisión Europea asignó otros 1,5 millones de euros (1,69 millones de dólares) de financiamiento humanitario para ayudar a los refugiados y migrantes en Serbia y Macedonia y para apoyar en el suministro de servicios de emergencia básicos.
El director general de la Organización Internacional para las Migraciones, William Lacy Swing, señaló que "podría parecer que el número de llegadas es alto. Pero es un número que podría ser fácilmente absorbido por la Unión Europea, una enorme área con más de 500 millones de habitantes".
"A fin de hacerlo, los Estados miembros de la UE deben cooperar para desarrollar un enfoque más coherente y más humanitario", dijo Swing.