Banco Central brasileño interviene en el mercado para evitar alza del dólar

Actualizado a las 11/09/2015 - 14:41

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RIO DE JANEIRO, 10 sep (Xinhua) -- El Banco Central de Brasil realizó hoy una subasta para vender en el mercado 1.500 millones de dólares con la intención de evitar una gran subida del dólar ante el real.

La decisión se tomó luego de que en la víspera la agencia de calificación Standard & Poors le quitara al país el grado de inversión segura.

La decisión del Banco Central se anunció después de que la jornada bursátil de este jueves iniciara con una gran alza del dólar ante el real, que llegó a cotizar en los 3,90 reales por dólar, y con una fuerte caída inicial de la Bolsa de Sao Paulo, la mayor de América Latina, que abrió con un descenso del 2,25 por ciento.

Con la subasta, y las palabras del gobierno brasileño de que se esforzará al máximo para intentar revertir la nota de S&P, el dólar finalmente cerró con una subida del 3,14 por ciento ante el real, que se cotiza en los 3,85 unidades por dólar, mientras que la bolsa cayó un ligero 0,33 por ciento.

El gobierno brasileño recurre habitualmente a las subastas de dólares en el mercado con el fin de evitar una alza súbita de la divisa estadounidense, que en lo que va de año ha subido en más de un 40 por ciento su valor respecto al dólar.

S&P anunció ayer que le quitaba el llamado "grado de inversión", la calificación que se otorga a los buenos pagadores y que Brasil tenía desde 2008, por el deterioro de las cuentas fiscales del país y por las dudas que genera la aprobación de los presupuestos de 2016 del gobierno en el Congreso.

En plena desaceleración, la economía brasileña debe contraerse este año un 1,49 por ciento según el gobierno y un 2,44 por ciento según el mercado financiero.

El país se encuentra en recesión técnica, tras tener en el segundo trimestre una contracción económica del 1,9 por ciento, que sigue a la del 0,7 por ciento del primer trimestre.

Debido a la crisis, el gobierno brasileño redujo el mes pasado su meta de superávit fiscal primario para este año al 0,15 por ciento del producto interno bruto (PIB) y, por primera vez en su historia, presentó unos presupuestos deficitarios para el año entrante, del orden del 0,5 por ciento del PIB.