SANTIAGO, 14 nov (Xinhua) -- La senadora y presidenta del Partido Socialista (PS) de Chile, Isabel Allende, afirmó hoy que el país enfrenta un "momento complejo", debido a la demanda marítima que Bolivia presentó en 2013 ante la Corte Internacional de La Haya.
"Tenemos un entorno internacional marcado para Chile por dificultades vecinales, donde continuamos sin poder superar conflictos atávicos y poder asentar una relación de cooperación y de interés mutuo con nuestros vecinos, afirmó Allende al hablar ante el Comité Central del PS.
"Como socialistas, ratificamos nuestra vocación latinoamericanista, y esperamos que una vez resuelto el caso en La Haya, podamos retomar el diálogo para encontrar la mejor solución para ambos países", agregó.
Sostuvo que el PS "apoya las decisiones que la presidenta Michelle Bachelet (quien es miembro del partido) ha tomado en esta materia de política exterior, y valoramos la posición de Estado de todas las fuerzas políticas al ponernos unitariamente tras ella".
Allende, hija del derrocado presidente Salvador Allende por militares en 1973, admitió que 2015 "ha sido un año difícil y duro en términos políticos, económicos y también éticos" para el gobierno y la coalición de centroizquierda que lo apoya, la Nueva Mayoría.
Explicó que Chile ha enfrentado este año la desaceleración económica, los reiterados casos de corrupción en las prácticas empresariales, como la colusión y la defraudación tributaria "que han significado una vez más esquilmar recursos a toda la ciudadanía y dañar la fe pública".
"Aún así hemos mantenido el rumbo de los cambios y hemos reafirmado nuestra promesa de mayor igualdad y cohesión social, en un escenario de restricciones económicas, con una ciudadanía más crítica y desconfiada del sistema político", indicó.
Añadió que 2015 ha sido también un año marcado por las malas prácticas empresariales y por la crisis de la Iglesia católica, con un fuerte impacto en las principales instituciones del país.
Allende dijo que la economía chilena ha sido golpeada por el fin del ciclo de precios altos de las materias primas, "sin que hayamos sido capaces como país de dar un salto en innovación y reconversión".
Consideró que Chile no ha capacitado a sus recursos humanos para generar un cambio en el modelo de desarrollo y no ha hecho inversiones potentes en ciencia, tecnología e innovación para fundar un nuevo modelo productivo.
Aseguró sin embargo que se ven "señales positivas y observamos una presidenta activa, una gestión política que ha ido precisando prioridades y reafirmando el funcionamiento normal de nuestra democracia".