La policía de la ciudad meridional china de Shenzhen anunció hoy jueves la desarticulación de diez "bancos clandestinos" que realizaban negocios ilegales por valor de 51.600 millones de yuanes (cerca de 8.000 millones de dólares).
Treinta y tres sospechosos fueron arrestados en Shenzhen el 4 de noviembre, cuando la ciudad movilizó a más de 100 policías en una operación para acabar con la banca ilegítima.
China ha afrontado problemas "cada vez más arduos y complicados" con los bancos clandestinos, que son instituciones financieras sin aprobación que suelen ser usadas para lavar dinero obtenido de la corrupción, apuestas en línea o fraudes de telecomunicaciones, advirtió el Ministerio de Seguridad Pública en septiembre.
La policía china ha cerrado 37 bancos ilegales en una campaña a escala nacional que emprendió en agosto, según la cartera.