El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, expresó hoy su "seria preocupación" por las recientes restricciones fronterizas impuestas por varios Estados de los Balcanes y pidió a todos los Estados en la región "responder de manera eficaz a los crecientes desafíos humanitarios".
"El secretario general pide a todos los Estados de la región responder de manera eficaz a los crecientes desafíos de la región y garantizar que sus políticas sobre revisión de solicitantes de asilo se ajusten a las leyes de refugiados internacionales y derechos humanos", se indicó en una declaración emitida por el vocero de Ban.
"Clasificar a los solicitantes de asilo por su presunta nacionalidad infringe el derecho humano de todas las personas de solicitar asilo, sin importar su nacionalidad, y de que sus casos individuales sean escuchados", añadió la declaración.
Conforme a las restricciones impuestas la semana pasada en las fronteras entre Grecia y la ex República Yugoslava de Macedonia y entre ésta y Serbia, sólo se permite el paso de sirios, afganos e iraquíes, mientras que se impide el acceso a iraníes, bengalíes y pakistaníes.
El secretario general "exhorta a los gobiernos europeos a mejorar de forma significativa sus capacidades de recepción y a acelerar la implementación de los programas de reubicación para refugiados", añadió la declaración.
Ban recordó que "la expulsión y devolución colectivas están estrictamente prohibidas por el derecho internacional".
Ban también reiteró su llamado a todos los Estados de la región a responder con compasión, solidaridad y responsabilidad compartida y señaló que la situación actual resalta la urgente necesidad de administración fronteriza coordinada, según la declaración.
En 2015, cerca de dos millones de refugiados y migrantes se han refugiado en Turquía y más de 700.000 en otros países de la región. Hasta el cinco por ciento de ellos necesitan ayuda médica por lesiones accidentales, hipotermia, quemaduras, episodios cardiovasculares, complicaciones en embarazo y parto, diabetes e hipertensión.
Los movimientos demográficos masivos, la escasez de agua y un refugio y saneamiento inadecuados incrementa el riesgo de contraer enfermedades transmisibles.
En las últimas 48 horas, cerca de 150 personas han regresado de forma voluntaria a Atenas, capital de Grecia, en donde se les aconseja que busquen asilo.
Cerca del cruce fronterizo de Edomani, en Grecia, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y sus socios establecieron un centro de tránsito integrado por siete grandes tiendas de campaña climatizadas donde las personas varadas pueden quedarse durante la noche y reciben alimentos calientes.