China tiene como objetivo mejorar la atención sanitaria materna e infantil y el registro familiar al tiempo que implementa la política de dos hijos.
El país ha adoptado medidas para distribuir de mejor forma los recursos sanitarios maternos e infantiles y formar a más médicos, dijo el subdirector de la Comisión Nacional de Salud y Planificación Familiar (CNSPF), Wang Peian, en una rueda de prensa celebrada hoy lunes en Beijing.
De acuerdo con la CNSPF, 90 millones de mujeres chinas pueden tener un segundo hijo con la política de dos hijos que entró en vigor el 1 de enero. Un 60 por ciento de las mismas tienen más de 35 años de edad y un 50 por ciento tienen 40 o más años.
"La nueva política ha aumentado la probabilidad de embarazos a edades más avanzadas, que están asociados a riesgos entre los que se incluyen anomalías genéticas y problemas laborales. Por eso, necesitamos mejores servicios sanitarios maternos e infantiles", señaló Wang.
El gobierno está urgiendo a las universidades y escuelas médicas a formar más comadronas y pediatras y pidiendo sueldos más altos para que dichas ocupaciones sean más atractivas, de acuerdo con el director del Departamento de Planificación Familiar Comunitaria de la CNSPF.
Como parte del XIII Plan Quinquenal chino, que abarca el periodo 2016-2020, los líderes han propuesto construir más hospitales en la parte occidental del país, que es más pobre.
Yang dijo que la CNSPF fortalecerá la supervisión sobre las autoridades locales emitiendo regulaciones que proporcionen a la gente no registrada en planificación familiar permisos de registro familiar o "hukou", un documento crucial que da a las personas acceso a servicios de bienestar social como el seguro médico y el acceso a la educación básica.
Estadísticas de 2010 muestran que China cuenta con alrededor de 13 millones de personas no registradas, entre las que se encuentran algunos "niños negros", que son segundos hijos nacidos ilegalmente con la política del hijo único.
"Pero la porción es pequeña", añadió Yang.
China ha regulado desde la década de los años 80 del siglo pasado para prohibir a las autoridades locales enlazar el registro familiar con la política de planificación familiar.