Alemania debate política sobre refugiados tras ataques en Colonia

Actualizado a las 12/01/2016 - 11:04

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Ralf Jaeger, secretario del Interior del estado alemán de Renania del Norte-Westfalia, dio a conocer los hallazgos iniciales de una investigación penal sobre una serie de delitos que aumentaron la presión sobre la canciller alemana Angela Merkel por su postura hacia los refugiados.(Xinhua/Shen Zhonghao)

Las autoridades alemanas dijeron hoy que la mayoría de los sospechosos de una serie de agresiones contra mujeres ocurridas la víspera del nuevo año en Colonia fueron inmigrantes.

Ralf Jaeger, secretario del Interior del estado alemán de Renania del Norte-Westfalia, dio a conocer los hallazgos iniciales de una investigación penal sobre una serie de delitos que aumentaron la presión sobre la canciller alemana Angela Merkel por su postura hacia los refugiados.

La víspera del nuevo año, un grupo de cerca de 1.000 hombres rodeó, acosó y robó especialmente a mujeres en Colonia. La policía indicó el domingo que hasta ese momento se habían presentado 516 denuncias relacionadas con las agresiones en esa ciudad del oeste de Alemania.

También se informó sobre ataques violentos similares en otras ciudades alemanas.

"Las declaraciones de los testigos, el informe de la policía de Colonia, así como las descripciones de la policía federal indican que la mayoría de las personas que cometieron estos delitos eran inmigrantes", dijo hoy Jaeger durante una sesión especial del Comité de Asuntos Internos del Parlamento estatal de Renania del Norte-Westfalia.

De acuerdo con los hallazgos iniciales, la policía está investigando actualmente a 19 sospechosos. Diez de ellos fueron identificados como solicitantes de asilo y se cree que los otros nueve residen de forma ilegal en Alemania.

En medio de preocupaciones por ataques de represalia, al menos cuatro violentos ataques contra extranjeros ocurrieron la noche del domingo en Colonia, los cuales fueron descritos por la policía como "delitos xenófobos".

Un grupo de cerca de 20 personas atacó a seis pakistaníes cerca de la estación central de trenes de Colonia. Según informes, dos de las víctimas fueron llevadas al hospital. Poco después, cinco agresores atacaron a un nacional sirio de 39 años de edad en la misma zona y lo dejaron ligeramente herido.

Además, un hombre de 19 años de edad de Guinea fue golpeado con una botella y otro africano fue seguido por cerca de 25 atacantes.

Los grupos de derecha también utilizaron las agresiones de la Nochevieja en Colonia para apoyar su causa y dijeron que demasiados refugiados están llegando a Alemania.

El sábado, manifestantes de extrema derecha salieron a las calles en Colonia para expresar su enojo por la violencia ocurrida la víspera del nuevo año.

La policía utilizó agua a presión y gas lacrimógeno después de que los manifestantes arrojaron botellas, petardos y piedras a la policía antidisturbios, lo que dejó tres oficiales y un periodista lesionados, según medios locales.

Un grupo hermano del movimiento Pegida, una organización de derecha que se opone a la inmigración proveniente de Medio Oriente, anunció que hoy por la noche convocará a una protesta en la ciudad alemana oriental de Leipzig.

Los musulmanes que viven en Alemania se han quejado de la creciente hostilidad en su contra tras los ataques de Colonia.

Aiman Mazyek, director del Consejo Central de Musulmanes en Alemania, dijo hoy que los musulmanes del país están experimentando "una nueva dimensión de odio", una referencia al creciente número de amenazas telefónicas, correos electrónicos y cartas de odio y enviados a la organización, así como a las declaraciones antiislámicas en los medios sociales desde el inicio del año.

En una carta abierta dirigida a Merkel, publicada el domingo en la ciudad de Duisburgo, cuatro refugiados que viven en Alemania expresaron su consternación por los incidentes en Colonia y en otras ciudades alemanas.

También declararon su disposición para "ayudar a garantizar que crímenes como los de Colonia no vuelvan a ocurrir", dentro de sus posibilidades.

La magnitud de las agresiones en Colonia consternó a Alemania y causó intensos debates en el país entre quienes dan la bienvenida a los solicitantes de asilo y quienes los rechazan, lo que ejerce una creciente presión sobre el gobierno de Merkel y su política de puertas abiertas para los solicitantes de asilo.

Alemania registró 1,1 millones de solicitantes de asilo en 2015, anunció este mes el ministro del Interior de Alemania, Thomas de Maiziere. Los críticos han cuestionado la capacidad de Alemania para integrar este número sin precedentes de recién llegados.

Hasta ahora, Merkel no ha titubeado sobre su política de refugiados, pero ha asumido una postura dura contra los refugiados que sean declarados culpables de la violencia en Colonia y dio a entender que apoyará enmiendas legales para facilitar la expulsión de solicitantes de asilo declarados culpables.

Se espera que funcionarios de la coalición gobernante de Merkel negocien rápidamente las propuestas esta semana.

Los ataques de Colonia también han causado temor entre los alemanes y una encuesta publicada el domingo en el diario alemán Bild indicó que 39 por ciento de los encuestados no considera que la policía brinde protección suficiente para todo el público, frente al 57 por ciento que sí lo cree.

Otra encuesta de la radiodifusora RTL encontró que 57 por ciento de los alemanes temen un aumento de los delitos junto con la afluencia récord de solicitantes de asilo y un 40 por ciento estuvo en desacuerdo.

No obstante, una mayoría de alemanes, el 60 por ciento, dijo que su opinión sobre los extranjeros no cambió y el 37 por ciento respondió que se han vuelto más críticos y más negativos respecto de los recién llegados.