Las nuevas estadísticas de consumo confirman el vigor del mercado chino |
Beijing,15/01/2016(El Pueblo en Línea)- Un nuevo estudio internacional sobre las tendencias de consumo de automóviles demuestra que los compradores de China están dispuestos a pagar por una unidad nueva mucho más dinero que cualquier cliente de otros países. Hasta cierto punto, este indicador confirma el vigor del mercado chino.
De acuerdo a los datos publicados por Kantar Media, el 41 por ciento de los consumidores chinos encuestados están dispuestos a pagar el equivalente a 32,200 dólares o más para adquirir un coche nuevo mientras que en Alemania solamente el 14 por ciento de las personas que participaron estaba dispuesto a pagar esa cantidad. Con respecto a Reino Unido la proporción fue del 10 por ciento, un 5 porciento en España y un 4 por ciento en Francia.
A medida que la economía mundial va experimentando ajustes estructurales, los indicadores tradicionales como el PIB, el volumen de las exportaciones y la inversión en activos fijos pueden ya no representar de forma integral el desarrollo económico de un país. Por delante de este telón de fondo, la orientación de los consumidores se ha convertido en un elemento cada vez más importante para analizar los patrones económicos.
Si tomamos a China como ejemplo, el sector de los servicios del país representó el 51,4 por ciento del PIB global durante los tres primeros trimestres del 2015. Los servicios aportaron el 58,4 por ciento del crecimiento económico, siendo el consumo el mayor motor del crecimiento del PIB de China.
En el mismo período, las ventas minoristas en línea vieron un incremento interanual de un 36,2 por ciento. Además, en los primeros 11 meses del pasado año, el valor añadido de la industria de alta tecnología aumentó un 10,4 por ciento durante un período de 12 meses. Es decir, 4,1 puntos porcentuales por encima que el logrado por las industrias tradicionales.
Mientras tanto, el plan de acción de "Internet +" está transformando el consumo en línea, dando lugar a un rápido desarrollo del comercio electrónico, de la oferta educativa, de la banca digital y de otro tipo de servicios.
La economía de una nación debe analizarse sobre la base de su propia condición. Los EE.UU., por ejemplo, utilizan el "índice champagne" para estimar el ingreso promedio de los hogares porque había demostrado ser preciso en un 90 por ciento.
“Para China, el XXIII Plan Quinquenal es una hoja de ruta hasta el 2020 en aras del desarrollo de la nación. En este momento, hay un mayor enfoque de la estructura económica que de la tasa de crecimiento”, destaca Stephen Roach, economista de la Universidad de Yale .
Con una tasa de crecimiento medio-alto, China optimiza su estructura económica y mejora su industria.
Un informe del Financial Times sugirió que, en comparación con los índices tradicionales, las ventas en línea, la capacidad de pasajeros de tren, la taquilla cinematográfica y algunas otras nuevas tendencias de consumo merecen mayor atención.
Bloomberg también considera como una buena noticia crecer con dos dígitos con servicios orientados a la demanda.
En la actualidad, China está adoptando una estrategia basada en la innovación, con énfasis en la reforma estructural de la oferta para dar paso a la economía de "la nueva normalidad".
Estas decisiones no sólo son el nuevo ímpetu de desarrollo de China, también representan nuevas oportunidades para la economía mundial, mediante la búsqueda de una mejor relación entre la oferta y la demanda.