DAVOS, Suiza, 21 ene (Xinhua) -- La economía de China está pasando por una serie de transiciones históricas y la reciente volatilidad de corto plazo del mercado será temporal, indicaron hoy en Davos expertos que asisten a la Reunión Anual 2016 del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés).
El gobierno chino está implementando reformas dolorosas que intentan transformar el crecimiento para pasar de un crecimiento impulsado por las inversiones y las manufacturas a uno orientado a los servicios y el consumo.
Los expertos advirtieron que la incertidumbre durante el proceso conducirá a alteraciones periódicas del mercado.
China registró un año turbulento en 2015. El crecimiento de la segunda mayor economía del mundo alcanzó su nivel más bajo en 25 años con 6,9 por ciento, en comparación con el 7,3 por ciento del año anterior.
"Consideramos que las transiciones son manejables", dijo la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, quien enfatizó la tranquilidad ante la reciente volatilidad.
"Se tiene que aceptar que habrá cierto grado de volatilidad; esto es totalmente compatible con los principios de mercado", añadió Lagarde.
El FMI dijo que espera que la economía china, un importante contribuyente al crecimiento mundial, crezca 6,3 por ciento en 2016.
"De hecho, China está atravesando por un ajuste cíclico", dijo Ray Dalio, presidente y director de inversiones de Bridgewater Associates de Estados Unidos.
"Las reformas y la dirigencia en China son en esencia muy buenos. A lo que estamos haciendo frente es a los desafíos de corto plazo", dijo Dalio.
"Esto podría durar dos a tres años", añadió. "El futuro de China es vibrante y joven y cualquier volatilidad es mundial y está vinculada a la política monetaria".
"China ha alcanzado el punto de no retorno y el país necesita profundizar las reformas para evitar la trampa del ingreso medio", dijo Jiang Jianqing, presidente de la junta directiva del Banco Industrial y Comercial de China.
"Ya no podemos depender de las inversiones. Tenemos que depender de la innovación y de las reformas económicas para generar la próxima oleada de crecimiento económico", explicó.
"Es una transición difícil para cualquier país, no se diga durante la era digital y con la falta de liquidez del mercado en el mundo tras la crisis", dijo Gary D. Cohn, presidente y director de operaciones de Goldman Sachs, Estados Unidos.
"La transformación de una economía capex (gastos de capital) a una economía opex (gastos de operación) significa que el gobierno tiene menos control del crecimiento económico", añadió.
"Hay una total desvinculación entre el mercado accionario y la economía real", dijo Zhang Xin, directora y una de las fundadoras de SOHO China.
Zhang afirmó que, en el sector de bienes raíces de China, el arrendamiento de propiedades es muy fuerte y que los valores de los activos reales están subiendo incluso mientras las compañías de bienes raíces cotizadas en bolsa cotizan con enormes descuentos en los mercados públicos.
A pesar de las críticas, China está realizando avances firmes: el consumo nacional creció de 49 por ciento del producto interno bruto (PIB) hace cinco años al 52,5 por ciento actual.
"China está en medio de una gran transición y en el proceso muchos activos serán revaluados", dijo Fang Xinghai, director general del Departamento de Economía Internacional de la Oficina del Grupo Central Principal para Asuntos Financieros y Económicos de República Popular de China.
Fang dijo que una combinación de factores chinos y mundiales causó la volatilidad reciente, una referencia al alza de las tasas por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos y al pobre desempeño de los mercados emergentes.
Fang añadió que no tiene duda de que China tiene talento para adaptarse.
Los servicios públicos todavía son tomados mucho en cuenta en China. El mercado es complejo y en ocasiones China no aborda esta complejidad tan bien como pudiera, explicó.
"Pero aprenderemos", añadió, ahora que la estrategia de reforma está en curso.