Más de 200 enfermedades reumáticas causan a la población en América Latina devastadores efectos en su calidad de vida y desempeño laboral, alertaron hoy expertos en un encuentro internacional sobre el tema en la capital panameña.
El director de la Liga Panamericana de Asociaciones Reumatológicas (Panlar) y director del Instituto Nacional de Rehabilitación de México, Carlos Pineda, dijo en entrevista con Xinhua que estás afecciones representan un riesgo mayor debido a la falta de especialistas, conocimiento y apoyo sobre el tema.
Pineda participa en el XIX Congreso Anual de la Panlar que comenzó el domingo pasado y se extenderá hasta mañana jueves, con el objetivo de difundir conocimiento y crear conciencia sobre el tema.
En el certamen, que congrega a más de 1.000 especialistas de 41 países, el especialista destacó la importancia de que los sistemas de salud de América Latina estén preparados para enfrentar estas enfermedades.
De acuerdo con Pineda, en todo el continente americano sólo radican unos 10.000 reumatólogos, lo cual es insuficiente.
Enfermedades como la artritis reumatoide y "espondilitis anquilosante" afectan a gente joven y en etapa reproductiva, al causar dolor, degeneración e inflamación de las articulaciones, lo cual disminuye sus capacidades físicas y de trabajo.
El director de la Panlar aclaró que la organización que representa no tiene el dato preciso sobre el costo a causa de estas enfermedades en América Latina, aunque consideró importante contar con dicha información.
"Más de 50 por ciento de la población adulta de 60 años tiene enfermedades reumáticas", observó.
Llamó la atención también sobre la necesidad de que los sistemas de salud de la región estén preparados para atender a los pacientes de enfermedades reumáticas.
Pineda consideró clave hacer un frente común con las asociaciones de pacientes, pacientes y los médicos que permita a los gobiernos estar conscientes de la situación y colaborar para darle mejores posibilidades a estas personas.
Señaló que uno de los motivos de preocupación son los despidos injustificados, de los cuales pueden ser objeto quienes padecen este tipo de enfermedades, muchas de las cuales son crónicas.
Detalló que la artritis reumatoide, el "lupus eritematoso", la "osteoartritis" y la "espondilitis anquilosante" no se curan, sino que se controlan.
Existen tratamientos tradicionales para este tipo de enfermedades, con medicamentos comunes, pero también con terapia biológica, de ingeniería genética y muy alto costo, precisó.
"No se requiere el tratamiento biológico en todos los casos, sino en casos seleccionados", indicó.
El director de Panlar observó que el "lupus eritematoso" sistémico representa una mayor gravedad en sus manifestaciones en el caso de los afroamericanos.
Explicó que es peor el pronóstico en el caso de estas personas, porque la enfermedad puede ser más agresiva en ellas, con mayores manifestaciones renales.
Agregó que algunos tratamientos para estas enfermedades son muy costosos y de muy largo plazo, a lo cual se suman efectos como la ausencia del trabajo y la posibilidad de llegar a condiciones de discapacidad.