Entrenadores extranjeros ayudan a los atletas chinos a brillar
De izquierda a derecha: Daniel Levavasseur, Francia, esgrima; Bruno Bini, Francia, fútbol; Mayuko Fujiki, Japón, natación sincronizada; Benoit Vetu, Francia, ciclismo en pista; Randall Huntington, EE.UU, pista y campo; y Tom Maher, Australia, baloncesto. [Ilustración con fotos de China Daily]
Francia,18/08/2016 (El Pueblo en Línea) - Una legión de entrenadores extranjeros ha hecho frente a las dificultades culturales para ayudar a los atletas chinos a brillar en el escenario mundial.
Mientras que el dúo de ciclismo en pista femenino formado por Gong Jinjie y Zhong Tianshi llegaba a la recta final en los Juegos Olímpicos de Río el viernes, un hombre corpulento con camiseta roja observaba atentamente desde su esquina del estadio lleno. El hombre gritaba en voz alta, concentrado en las dos atletas chinas.
Segundos más tarde, la tensión en su cara llegó al éxtasis. Comenzó a agitar los puños en el aire para celebrar el oro olímpico del país conocido como el "reino de las bicicletas".
Ese hombre feliz era Benoit Vetu, un entrenador francés de ciclismo en pista que se encuentra entre los 29 entrenadores extranjeros contratados por la delegación de China para preparar a sus atletas en 17 deportes, entre ellos esgrima, baloncesto y pista y campo, en los Juegos Olímpicos de Río.
Una potencia tradicionalmente fuerte en deportes como el tenis de mesa y bádminton, China espera compensar su debilidad en deportes dominados por países occidentales contratando ayuda de Occidente.
El oro en ciclismo ha mostrado como esta ayuda extranjera está funcionando.
"Sin él, no estaríamos aquí esta noche," dijo una emocionada Gong, quién casi consiguió el oro en Londres junto a su ex compañera Guo Shuang y posteriormente fueron descalificadas por a falta en la final.
"Él realmente puso su corazón y alma en este trabajo, tratando de entendernos y supervisar cada cambio en nuestra condición física, mental y emocional. Tenemos confianza mutua, y eso es lo que hace que todo vaya bien", dijo Gong.
Para centrarse completamente en su trabajo, Vetu, un antiguo campeón de sprint olímpico, trasladó a su familia a vivir con él al Centro Nacional de Entrenamiento en un suburbio al oeste de Beijing después de asumir su puesto de entrenador en 2013.
Una tarde típica de Vetu en Beijing comienza con una sesión de tres horas de entrenamiento con atletas en la pista. Luego acompaña a su hijo de 4 años a montar en bicicleta pequeña para divertirse.
"No fue una decisión fácil. Fue bastante difícil al principio por los problemas de comunicación y la vida en China. Ahora, parece que todo ha valido la pena", dijo Vetu, de 43 años.
Basándose en el principio de "salir e invitar a entrar", la autoridad encargada de deportes en China comenzó a invitar a más entrenadores extranjeros después de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 para ayudar a los atletas a prepararse para los JJ.OO de Londres en 2012, donde había 11 entrenadores extranjeros contratados.
Algunos de ellos, incluido el entrenador francés de esgrima Daniel Levavasseur, regresaron a China después de Londres, citando la unión emocional formada después de años de trabajo en el país.
"He sido entrenador y he vivido en China durante los últimos seis años. Siento que ya soy un chino más. Me encanta el país y mis atletas", dijo Levavasseur, que llevó a las esgrimistas chinas hasta la medalla de oro en esgrima en equipo femenino en Londres.
Levavasseur visitó por primera vez China en 1987 para un intercambio de conocimientos después de ser invitado por la Asociación de Esgrima de China. Con 69 años, dijo se retirará de la escena nacional después de los JJ.OO de Río, pero no alejará de la esgrima en China, ya que planea capacitar a entrenadores locales en China.
El afecto del francés resonó tanto el de la atleta Hao Jialu, un miembro del equipo femenino de esgrima, que rompió a llorar después de perder ante Rumania en la final en Río de Janeiro.
"No es sólo porque no hayamos podido defender el título, es por el abuelo (Levavasseur)", dijo Hao llorando. "Aún así nos dijo que éramos las mejores y estos son sus últimos Juegos Olímpicos".
Mayuko Fujiki de Japón también tiene una exitosa carrera en China. Sólo dirigió a la pareja china Huang Xuechen y Sun Wenyan hasta conseguir la plata el martes en natación sincronizada en parejas.
La predecesora de Fujiki, Masayo Imura, fue quien llevó a las atletas de natación sincronizada china al nivel más alto. Imura llevó al equipo chino hasta la medalla de bronce en parejas y la plata en equipos en los Juegos Olímpicos de Londres.
La fórmula ganadora no aparece de la noche a la mañana. Sin embargo, se tarda mucho tiempo en superar las diferencias culturales, las barreras de comunicación y cuestiones de confianza antes de que las ideas extranjeras funcionen. Crear química es una prueba para ambos lados.
Randall Huntington, un entrenador de atletismo de Estados Unidos que formó a los equipos chinos de salto largo y triple salto para los JJ.OO de Río de Janeiro, dijo que la comunicación nunca es un asunto fácil pero entrenar en China ha sido "una muy buena experiencia".
(Editor: Elena G.,Rocío Huang)