El esmog persistente en grandes partes de China está interrumpiendo la actividad en las escuelas y causando problemas en los viajes de vacaciones.
Hoy lunes es el último día de las vacaciones de Año Nuevo en China, pero las autoridades de Zhengzhou, capital de la provincia central de Henan, ordenaron a los estudiantes de primaria y secundaria, así como a los jardines de infancia, que tomen libre el martes, pues la ciudad está en alerta roja por esmog.
China aplica un sistema de alerta para tiempo adverso de cuatro niveles codificados en cuatro colores, siendo el rojo el más grave, seguido por el naranja, amarillo y azul.
Según un aviso urgente emitido por el buró de educación de la ciudad, las escuelas primarias y secundarias pueden utilizar los fines de semana o días festivos para compensar las clases que falten.
En la vecina provincia de Shandong, la estación meteorológica provincial emitió alertas naranjas de niebla y esmog, que han llevado a una visibilidad de menos de 200 metros en 11 ciudades de la provincia.
Alrededor de 50 vuelos se vieron afectados en la capital provincial de Jinan hasta las 10:00. Cerca de 300 peajes a lo largo de 30 autopistas han sido cerrados, según el departamento de transporte provincial.
La fuerte niebla también se observó en Chengdu, capital de la provincia de Sichuan, en el suroeste de China, dejando a 8.000 pasajeros atrapados en el aeropuerto.
Una pista en el aeródromo internacional de Chengdu Shuangliu fue cerrada por cuatro horas, dejando más de 80 vuelos retrasados y siete cancelados.
Los vuelos no se reanudaron hasta las 11:40, explicaron desde la instalación aeroportuaria.