Por Noemí Galbán
LA HABANA, 11 ene (Xinhua) -- Evasiva, ambigua y contradictoria, así fue para los cubanos la rueda de prensa del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ofrecida este miércoles en Nueva York, a nueve días de asumir el cargo.
Muy pocos ciudadanos de la isla tuvieron la oportunidad de ver en vivo las declaraciones de Trump transmitidas en un canal local, que replica la señal de la multiestatal latinoamericana Telesur.
No obstante, los encuestados por Xinhua coincidieron en señalar que luego de escuchar alrededor de una docena de respuestas de Trump a igual número de preguntas de los periodistas, muchas son las interrogantes que quedaron.
"Algo que me resultó evidente es que Cuba no forma parte de las prioridades inmediatas de Trump, así que la incógnita es sobre las decisiones que adoptará respecto a mi país, si se seguirá avanzando o se retrocederá en el proceso de normalización de relaciones", manifestó Tania Orozco.
La trabajadora estatal caribeña indicó que esta postura resulta a su juicio "dañina" para el estado actual de los vínculos restablecidos en diciembre de 2014, y luego oficializados con las aperturas de embajadas en La Habana y Washington en el verano de 2015.
"La visita del presidente Barack Obama en marzo del año pasado fue otro paso importante que dinamizó la firma de un conjunto de acuerdos, que si bien aún no impactan directamente en la vida cotidiana de los cubanos, al menos abren el camino para futuros convenios que sí lo hagan", opinó Orozco.
Por su parte, Ibrahim Navarro, un jubilado residente en la capital, se refirió a Rusia, según su parecer la "gran protagonista" de la conferencia de prensa y uno de los escasos temas de política internacional que Trump abordó.
"Al final creo que a nadie le quedó claro si Rusia tuvo o no que ver en la elección de Trump, y si las denuncias de intromisión son ciertas o no. Tampoco si la intención es establecer buenas relaciones con (Vladimir) Putin o intimidarlo para que respete a Estados Unidos", afirmó.
Trump evadió en varias oportunidades las preguntas de los periodistas sobre un supuesto ataque cibernético de Moscú al Comité Nacional del Partido Demócrata, que afectó los resultados electorales del pasado 8 de noviembre.
Rusia ha calificado esta acusación filtrada a medios de prensa norteamericanos por las agencias de inteligencia de ese país como "literatura barata".
Trump consideró que el "hackeo" pudo ser realizado por cualquier nación, y de ser cierto revela la errada dirección con la cual cuentan estas instituciones.
"Lo que también me llamó la atención fue su inflexibilidad y autoritarismo con el asunto de construir un muro en la frontera con México y decir que ese país se ha aprovechado de Estados Unidos, cuando todo el mundo sabe que es todo lo contrario", mencionó Orozco.
El presidente electo aseguró que no va a esperar por las negociaciones correspondientes con el gobierno de Enrique Peña Nieto para definir cuestiones como el presupuesto para la inversión de la obra, sino que va a iniciar la construcción del muro en breve y luego estudiará las opciones para que México pague.
Los medios cubanos, como la agencia de noticias Prensa Latina y las emisiones informativas de la televisión nacional, hasta el momento se han limitado a reseñar lo expresado por el mandatario electo en la comparecencia.
Entre otros temas de política doméstica, Trump señaló que en su mandato no habrá conflicto de intereses debido a su condición de presidente de un conglomerado de empresas con ganancias multimillonarias que están sujetas a auditoría en la actualidad, según dijo.
Trump acusó a la administración de Obama de haber creado al autodenominado Estado Islámico, al tiempo que criticó duramente al programa de salud "Obamacare" implementado por el presidente saliente, y prometió sustituirlo por una nueva opción sin entrar en detalles.
El presidente electo reiteró su determinación de generar millones de puestos de trabajo para los norteamericanos al presionar a los dueños de importantes compañías a repatriar sus fábricas hoy día construidas en el exterior, so pena de pagar altos impuestos.
En esta jornada también tuvo lugar la audiencia de confirmación en el Senado del secretario de Estado designado por Trump, Rex Tillerson, quien sí se refirió a Cuba, y declaró que recomendaría al presidente vetar cualquier legislación propuesta por Obama para hacer irreversible el acercamiento entre los dos países.
El ex jefe de la trasnacional petrolera ExxonMobil reveló a su vez que las relaciones con La Habana están en la lista de las órdenes ejecutivas que el presidente se prepara para revisar una vez asuma el cargo el próximo 20 de enero.
Tillerson anunció que no se aprobaría inmediatamente un proyecto de ley para levantar la prohibición de viajar a Cuba en calidad de turistas, hasta que se haga un estudio de las políticas legadas por Obama.
El ex directivo agregó que aconsejará a Trump frenar cualquier medida para levantar el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a la isla desde 1961.
Tillerson también dijo que recomendará "examinar cuidadosamente los criterios" por los cuales Cuba fue excluida en 2015 de la lista de estados patrocinadores del terrorismo, para luego determinar si "esa eliminación fue apropiada".