Las copias no autorizadas de reliquias culturales infringen la ley

Pueblo en Línea  2017:02:13.15:41

Fuente: China Daily

Las copias no autorizadas de reliquias culturales infringen la ley

Foto de una exposición de los guerreros de terracota falsos en el condado Taihu, provincia de Anhui. [Foto / VCG]

Anhui, 13/02/2017 (El Pueblo en Línea) - Miles de guerreros de terracota falsos fueron expuestos en el condado Taihu, provincia de Anhui, sin el consentimiento o la autorización de los funcionarios que supervisan las reliquias auténticas, según informó el diario Beijing News el sábado:

En un comunicado, la administración del mausoleo del primer emperador de la dinastía Qin (221-206 a.C) en Xi'an, provincia de Shaanxi, lugar donde se encuentran los guerreros de terracota auténticos, negó cualquier conexión con las estatuas falsas, lo que constituye una "violación manifiesta" de sus derechos.

Sin embargo, el supervisor de la exposición no autorizada en el distrito Taihu argumentó que las estatuas falsas eran "creaciones exclusivas", como la escultura de Qinshihuang saludando desde la muralla de la ciudad, que según sus creadores no infringe los derechos de propiedad intelectual.

Pero tal argumento no tiene una base legal. Incluso añadiendo elementos creativos, las estatuas siguen siendo copias no autorizadas de las originales, y por lo que la exposición de Taihu está exhibiendo falsificaciones.

Lo que es aún peor, el supervisor fue más allá para "defender su punto de vista", diciendo que los turistas serían informados de que las estatuas eran réplicas, en una muestra de "sinceridad".

Admitir el plagio no exime de responsabilidad por haber falsificado las reliquias culturales. Sólo mediante la obtención del consentimiento de los propietarios de los derechos de propiedad intelectual se puede reproducir una reliquia cultural.

Desafortunadamente, este tipo de infracción de los derechos de propiedad intelectual no sólo son comunes, sino que a menudo los gobiernos locales no toman estos casos en serio.

Las autoridades locales no sólo deben cumplir con su deber de mantener a raya a los imitadores no autorizados, sino que también deben esforzarse más en morder esa falsificación en el brote. En el caso de Taihu, el gran "parque cultural" no debería haber sido aprobado en primer lugar si los funcionarios interesados eran conscientes de lo que se iba a mostrar.