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Una maestra rural china es honrada por su entrega a la educación e infancia (2)

Pueblo en Línea  2017:02:20.16:51

Baiyang es una de las aldeas más remotas del municipio Fengxin. [Foto: Wang Jian]

En 1982, la perseverante Zhi logró casarse con Cai, sin embargo una nuevo puesto los volvió a separar. Ella fue promovida para trabajar en una nueva escuela, 50 kilómetros más lejos.

Al llegar a la nueva escuela, Zhi se dedicó en cuerpo y alma a la enseñanza y rápidamente fue nombrada directora. Allí también enseñó chino, matemáticas y educación artística.

Con 50 años, Zhi aprendió a utilizar una computadora para disponer de material didáctico que ayudará a comprender el mundo en que vivimos.

Su dedicación le valió el respeto de toda la comunidad. Las mujeres cocinaban para ella y la apoyaban en la escuela.

Sin embargo, el esfuerzo y las extensas jornadas de trabajo comenzaron a minar la salud de Zhi.

En 2003, se le diagnosticó cálculos biliares y tres años más tarde, su presión arterial alta comenzó a deteriorar su vista. Sin embargo, siempre su prioridad fue enseñar y cada vez que le daban de alta en el hospital, ella volvía a la escuela.

En el 2012, Zhi fue invitada a enseñar en Baiyang, una de las aldeas más remotas del condado de Fengxin.

Su familia se opuso, alegando problemas de salud y avanzada edad, pero ella insistió en ir porque no podía abandonar a los niños y "negarles el derecho a que pudieran aprender".

Ese verano, junto a otros compañeros, Zhi y su esposo trabajaron durante meses para ayudar a desarrollar la escuela de Baiyang. Todavía Zhi se mantiene como maestra de esa institución educativa.

Zhi considera que la cúspide de su felicidad es cuando puede constatar el éxito que logran sus estudiantes en la vida, aunque lamenta no haber pasado más tiempo con su propia familia, especialmente con sus dos hijas.

A pesar de esto, Zhi está orgullosa del gran trabajo y servicio que ha ofrecido a su país.

"Los niños de las montañas también son mis hijos", afirma Zhi. "Siempre y cuando tenga fuerza y mi salud me lo permita, nunca dejaré de enseñarles".


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(Web editor: Elena G., Rocío Huang)

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