Guadalajara, 30/03/2017 (El Pueblo en Línea) -Juan Pedro, quien con 595 kilos llegó a ser el hombre más obeso del mundo, está preparado para entrar al quirófano el próximo 9 de mayo en la ciudad mexicana de Guadalajara luego de perder casi 30 por ciento de su peso corporal, informaron el martes fuentes médicas, reportó El Nuevo Herald.
Al momento de ser pesado este martes, Juan Pedro había perdido poco más de 175 kilogramos, situándose en 419 kilos. Aunque sigue siendo uno de los hombres más obesos del mundo, la pérdida de peso le proporciona la oportunidad de ser sometido a cirugía con un riesgo disminuido, indicó el centro Gastric Bypass Mexico.
Juan Pedro, originario de Aguascalientes, fue visitado en noviembre de 2016 por Castañeda en su domicilio, donde se encontraba postrado en una cama forjada por su familia expresamente para soportar su peso.
El cirujano bariatra, especialista en obesidad, lo incluyó dentro de los casos considerados como de ayuda social que su centro saca adelante cada año.
El equipo del médico organizó el traslado de Juan Pedro a Guadalajara, donde fue sometido a exámenes y revisiones, así como a un tratamiento de choque para poder afrontar lo antes posible una cirugía.
Juan Pedro llegó a Guadalajara con una diabetes tipo II descontrolada, hipertensión, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) e hipotiroidismo, lo que unido a su gran sobrepeso lo ubicaba como candidato a muerte inminente.
El tratamiento consistió en una dieta balanceada diseñada para que, sin pasar hambre, pudiera ir bajando de peso para conseguir una reducción que le diera mayores oportunidades para el proceso quirúrgico.
Al paciente se le realizará un bypass gástrico con derivación biliopancreática en dos tiempos: en mayo próximo se le reducirá el estómago de sus actuales cinco litros de capacidad a poco más de 40 centilitros, y alrededor de noviembre de se efectuará una segunda intervención que le permitirá una menor absorción de los alimentos que ingiera.
Se espera que Juan Pedro pueda bajar hasta 50 por ciento de su peso remanente en los próximos seis meses y casi una tercera parte más tras la segunda intervención.
Luego deberá ser atendido vía cirugía plástica para librarlo de más de 30 kilos de piel que le sobrará.
Se estima que para finales de 2018, Juan Pedro podría pesar alrededor de 110 kilos, con una mejora absoluta de todas sus patologías y con la posibilidad de rehacer y continuar con su vida.