China, como uno de los mercados de mayor y más rápido crecimiento, utiliza cada vez más las nuevas tecnologías en la preservación del patrimonio cultural, entrelazándolo con la vida y el disfrute cotidianos de todas las personas interesadas.
El Shanghai Dashijie (El Vasto Mundo en Shanghai), reabrió este viernes ofreciendo una sala de realidad virtual interactiva que recrea escenas de la histórica Shanghai. Desde 1917, este cine-teatro es el más popular de la gran urbe china.
Por su parte, el vecindario tradicional de la ciudad Shikumen ha sido documentado digitalmente por cámaras de realidad virtual en un genial esfuerzo por preservar la arquitectura que peligra con desaparecer.
El año pasado, el patrimonio cultural de la provincia de Yunnan fue recreado mediante el uso de la realidad virtual y la realidad aumentada en la IV Exposición Anual del Patrimonio Cultural Inmaterial, celebrada en la provincia de Shandong.
Beijing también acogió un concurso de innovación, donde la realidad aumentada y la realidad virtual se aplicaron en reconstruir el Yuanmingyuan (Antiguo Palacio de Verano) en versión para dispositivos móviles.
"A través de la estrategia nacional “Internet +”, el patrimonio cultural ha entrado en la vida diaria de las personas ", afirmó Lu Qiong, subdirector del departamento de preservación y arqueología de la Administración Estatal del Patrimonio Cultural.
“Actualmente, el país promueve la digitalización de diversas colecciones y símbolos del patrimonio cultural nacional y explora nuevas formas de compartir los recursos digitales y desarrollar nuevos conceptos de consumo y disfrute relacionados con el patrimonio”, asegura Lu.
Por ejemplo, en marzo de este año se concretó la primera asociación estratégica nacional "Patrimonio Cultural Intangible + Realidad Virtual", formada por dos empresas emergentes de Beijing, informó Vrlequ, analista en línea.
"El patrimonio cultural maquetado digitalmente ofrece un nuevo modelo de propiedad intelectual cultural que puede ser ampliado y utilizado", subrayó He Yan, director del Instituto de Investigación de la Tecnología Digital de la Universidad Tsinghua.
"En el futuro, los recursos culturales no se limitarán a un tiempo o espacio determinados", concluyó He.