RIO DE JANEIRO, 13 sep (Xinhua) -- El gobierno brasileño lanzó hoy el Plan de Dimisiones Voluntarias (PDV), con el que busca reducir en 5.000 el número de funcionarios federales y ahorrar 1.000 millones de reales (unos 320 millones de dólares) anuales.
El Ministerio de Planificación, Desarrollo y Gestión informó que aquellos servidores públicos interesados en apuntarse al PDV pueden hacerlo hasta el último día del año, aunque la desvinculación del gobierno federal será en 2018.
El gobierno admitió que no espera una gran adhesión para el plan entre sus 630.000 servidores públicos en activo.
Todos aquellos empleados públicos que quieran desvincularse de la administración federal recibirán una indemnización de 1,25 veces su sueldo mensual por año de servicio, el pago de sus vacaciones y una gratificación navideña.
El gobierno del presidente brasileño, Michel Temer, asumió hace un año con la promesa de recortar personal, aunque de enero a julio de este año la administración federal contrató más servidores públicos que los 5.000 que pretende desvincular a través del PDV.