BEIJING, 14 sep (Xinhua) -- La inversión directa extrajera (IDE) en la parte continental de China subió un 9,1 por ciento interanual en agosto, hasta llegar a 62.520 millones de yuanes (9.600 millones de dólares), mostraron datos ofrecidos hoy jueves por el Ministerio de Comercio.
Durante los primeros ocho meses, el flujo cayó un 0,2 por ciento sobre una base interanual y se situó en 547.940 millones de yuanes, según la misma fuente.
La tendencia al alza de la inversión extranjera en los sectores de alta gama se mantuvo.
La manufactura de alta tecnología registró un aumento de la IDE del 15 por ciento hasta los 43.690 millones de yuanes, mientras que la inversión foránea en servicios de alta tecnología se incrementó un 21,4 por ciento para situarse en 81.440 millones.
La inversión directa en el exterior (ODI, en sus siglas en inglés) no financiera de las compañías chinas descendió un 41,8 por ciento interanual en los primeros ocho meses hasta llegar a 68.720 millones de dólares, principalmente debido a las medidas del gobierro para frenar las inversiones irracionales.
Como el gobierno ha adoptado medidas para controlar la inversión irracional, no se han dado nuevos proyectos de inversión en los sectores de los bienes raíces, el deportes y el entretenimiento, apuntó dicho ministerio.
La inversión en países involucrados en la Iniciativa de la Franja y la Ruta se situó en 8.550 millones de dólares, cifra que representa el 12,4 por ciento del total de la ODI, 4,3 puntos más que en el mismo periodo de 2016.
Aunque las empresas chinas se están volviendo globales, la IDE todavía es muy útil para China en la actualidad.
El impacto de la IDE en el país asiático es enorme y patente, desde los centros de investigación y desarrollo y las transferencias de tecnología hasta la adquisición de capacidades de gestión de primer nivel.
El liderazgo chino se ha comprometido a crear un "entorno empresarial estable, justo, trasparente y previsible", y para ello ha puesto en marcha una serie de medidas.
China ha establecido 11 zonas de libre comercio donde las firmas extranjeras pueden evitar los trámites burocráticos a la hora de solicitar el registro. Por otra parte, se están reduciendo la lista de sectores vetados a los inversionistas extranjeros y las restricciones de acceso al mercado a sectores tales como el transporte y los servicios financieros.