China no dependerá de grandes cantidades de importaciones de maíz en su plan de bioetanol

Actualizado a las 30/09/2017 - 09:58

Palabras clave：

BEIJING, 29 sep (Xinhua) -- El plan de China para incrementar el uso de la gasolina de bioetanol no tendrá impacto significativo en el mercado de cereales y sería "poco realista" para el país importar grandes cantidades de maíz, indicó hoy viernes un funcionario relacionado con agricultura.

El combustible de etanol, conocido como E10, es gasolina ordinaria con un 10 por ciento de etanol, y según lo esperado reducirá las emisiones de monóxido de carbono y dióxido de carbono.

"El plan del gobierno chino para incrementar la producción del combustible de etanol consumirá los inventarios de maíz del país", informó Han Jun, director de la oficina del equipo dirigente central de la labor agrícola, en una conferencia de prensa.

El apoyo durante años a los campesinos que cultivan maíz ha dejado en China unas existencias sustanciales del producto. La producción de maíz de China alcanzó los 220 millones de toneladas en 2016, mientras los inventarios sumaron 230 millones de toneladas.

Según los cálculos del gobierno chino, las reservas de maíz del país resultarán suficientes en el corto plazo y el mercado de maíz logrará un equilibrio entre el suministro y la demanda en una horquilla de tres a cinco años.

Para China, el principio básico del desarrollo del combustible biológico reside en que no se genere una amenaza a la seguridad alimentaria, destacó Han.

China lanzó en 2004 unos programas piloto de conversión de maíz en etanol como parte de los esfuerzos para reducir las emisiones y promover las nuevas energías. China es el tercer productor mundial de bioetanol, con un consumo cercano a los 2,6 millones de toneladas al año.

A principios de este mes, China manifestó su esperanza de usar gasolina de bioetanol en todo el país en 2020 y expresó su deseo de conseguir en esas fechas un sistema avanzado y plantas de demostración de biocombustibles líquidos operativas que sean capaces de producir 50.000 toneladas de etanol celulósico al año.

Para reducir las existencias de maíz, China anunció el recorte de la superficie de cultivo de este cereal en unas 670.000 hectáreas, dejando paso al cultivo de otros cereales en 2017.