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Proponen reciclar escombros tras experiencias de terremotos en Chile y México

SANTIAGO, 26 feb (Xinhua) -- Una guía para reciclar escombros para su reutilización tras sismos de gran escala, que recoge las experiencias con terremotos de gran magnitud en Chile y México, fue anunciada hoy por la Fundación Proyecta Memoria en Chile, en el contexto de una nueva conmemoración del terremoto y tsunami del 27 de febrero de 2010.

La elaboración del documento Hospitales de Escombros, una guía para generar espacios de resguardo de escombros para su reutilización, se trata de una iniciativa que reúne tres años de trabajo y recoge la experiencia de rescate de la memoria en los sismos de Chile de febrero de 2010 y septiembre de 2015, y los terremotos de México de 2017 en Ciudad de México y Oaxaca.

"Toda ciudad que genere escombros, con desastre o sin desastre, tiene la oportunidad de implementar esta infraestructura urbana, que como fundación denominamos 'Hospitales de Escombros', que son espacios fiscales o privados que tiene como objetivo resguardar, clasificar y trabajar este material para ser reutilizado en el futuro", dijo Patricio Mora, director ejecutivo de Fundación Proyecta Memoria, al anunciar la iniciativa.

"A un mes del terremoto de México del 2017 fuimos a conocer y divulgar esta iniciativa en la zona del Istmo y en Oaxaca en México, ya antes lo habíamos hecho en las regiones del centro y sur de nuestro país afectados por el 27F, igualmente para el terremoto de Coquimbo en el 2015 y ha sido expuesto a académicos en Londres con buena recepción", añadió Mora.

Chile genera más de seis millones de toneladas al año de residuos de la construcción y demolición, de los cuales un 60% son depositados en lugares no autorizados, según un estudio de la Universidad Católica de Chile del año 2017. Este índice sin duda, tras un evento socio natural como un terremoto o tsunami aumenta considerablemente.

Hace justo ocho años, un devastador terremoto de 8,8 en la escala de Richter y un tsunami afectaron la zona centro y sur de Chile provocando medio millar de víctimas, el evento generó la mayor cantidad de escombros durante el siglo XXI, pese a esto "el país no posee una política de manejo y reutilización de este material", apuntó Mora.

"La idea es que estos espacios estén asociados a Escuelas Taller donde se trabajen los oficios como el adobe, ladrillos o maderas y que preste ayuda a la comunidad. Por ejemplo cuando algún vecino no tenga dinero para construir una vivienda o una plaza, pueda ir a buscar ladrillos o maderas a este lugar. Es una especie de 'Farmacia Popular' pero relacionada con la arquitectura y la ciudad", comentó por su parte Hilda Basoalto, presidenta de la fundación.

Luego de los terremotos en México de 2017, la Fundación Proyecta Memoria viajó a la zona del Istmo en Oaxaca con el objetivo de compartir la experiencia de Chile y asesorar a vecinos y autoridades sobre la implementación de esta infraestructura urbana; en el marco de la visita fueron capacitadas más de 300 personas entre vecinos, profesionistas y autoridades locales, tras lo cual surgieron diversos hospitales de escombros familiares en comunidades como Ixtaltepec e Ixtepec.

"En la región del Istmo, Oaxaca, México, después del terremoto del 7 de septiembre una gran cantidad de materiales y escombros fueron depositados en las márgenes de ríos donde se mezcló material que tenía un gran potencial para reutilizarse en el futuro y que solo necesitaba ser limpiado, clasificado y resguardado para su posterior uso en los trabajos de reconstrucción", dijo la arquitecta Claudina de Gyves, arquitecta de Casa de la Ciudad.

Esa es una iniciativa de la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca, en México, coparticipante en el proyecto con el que se busca "generar una cultura de preservación del patrimonio edificado, y de los materiales y sistemas constructivos tradicionales ante eventos naturales como los sismos que suceden con gran frecuencia en el sur de México".

La fundación adelantó que durante el año seguirá trabajando con ciudades mexicanas en esta materia y abriendo puentes de intercambio entre las experiencias chilenas y mexicanas, para ampliarlas en un futuro al conjunto de países del continente.

En el marco de las conmemoraciones del terremoto de 2010 el gobierno chileno ha anunciado que el proceso de reconstrucción ha culminado en un 98 por ciento.