MOSCU, 14 mar (Xinhua) -- Expertos y funcionarios en Rusia consideran poco probable que la sustitución de Rex Tillerson con el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), Mike Pompeo, en el cargo de secretario de Estado de Estados Unidos pueda ayudar a mejorar las relaciones entre Moscú y Washington.
La repentina destitución de Tillerson anunciada el martes por el presidente estadounidense, Donald Trump, ha provocado preocupaciones sobre la futura política exterior de Washington.
Oleg Ignatov, subdirector del Centro para Política Actual en Moscú dijo que no espera que Pompeo altere el curso de las relaciones con Rusia.
"No creo que debamos esperar algún avance. Las relaciones entre los dos países son muy malas. Y existen señales de que pueden degradarse más", comentó en el sitio web del instituto de consultoría.
"Me temo que el tono de confrontación de parte de los diplomáticos estadounidenses sólo puede incrementarse", agregó.
El vocero del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo a medios locales que "en cualquier caso, sigue existiendo esperanza de... un enfoque sereno en las relaciones bilaterales".
Konstantin Kosachov, director del comité de asuntos internacionales del Consejo de la Federación, la cámara alta del Parlamento de Rusia, dijo que la política exterior de Estados Unidos es resultado de los "compromisos entre la Casa Blanca y el Capitolio".
"Y, en este sentido, la estrategia de contener a Rusia, como un compromiso ya existente entre ellos, no cambiará", agregó.
Al compartir un sentimiento pesimista similar, Dmitry Kamyshev, columnista del diario "Vedomosti", dijo que la salida de Tillerson demostró "un colapso final de un enfoque de negocios aplicado a la política".
Kamyshev dijo que el enfoque de Trump demostró su debilidad poco después de su investidura. Cuando la administración Trump intentó "al menos establecer un diálogo con Moscú", enfrentó la oposición del Congreso y de oficiales de defensa y seguridad, agregó.
Peskov, el vocero del Kremlin, dijo que no cree que la relación ruso-estadounidense empeore.
"Vean, difícilmente es posible caer más allá del piso", por lo tanto, no existe temor de un mayor deterioro, declaró Peskov.