RIO DE JANEIRO, 15 mar (Xinhua) -- El presidente de Brasil, Michel Temer, prometió hoy que el asesinato de la concejala y activista de Río de Janeiro, Marielle Franco, "no quedará impune", y calificó el acto de "extrema cobardía".
"Lamento este acto de extrema cobardía contra la concejala Marielle Franco. Me solidarizo con familiares y amigos y acompaño la investigación de los hechos para castigar a los autores de este crimen", escribió Temer en su cuenta de Twitter.
El mandatario solicitó al ministro de Seguridad Pública, Raul Jungmann, poner la Policía Federal a disposición de las investigaciones.
Temer se reunió este jueves con varios de sus ministros para abordar el asesinato de Franco, el cual conmocionó a Brasil, y puso en entredicho la intervención militar para garantizar la seguridad en el estado de Río de Janeiro, decretada por el mandatario a mediados de febrero pasado.
Tras el encuentro, la Presidencia de la República emitió un comunicado en el que calificó el asesinato de un "atentado al estado de derecho y un atentado a la democracia".
La concejala Marielle Franco, del izquierdista Partido Socialista y Libertad (PSOL), de 38 años de edad, fue asesinada a tiros la noche del miércoles junto a su chofer cuando circulaban por el centro de la ciudad de Río de Janeiro.
En la Cámara Municipal de Río de Janeiro, Franco presidía la Comisión de la Mujer y, el mes pasado, fue nombrada ponente de la comisión que daba seguimiento a los trabajos de la intervención federal para garantizar la seguridad pública, sobre la cual se mostraba crítica.
El mes pasado, Franco aseguró que la intervención federal era una "farsa".
En el momento del ataque, la concejala daba seguimiento a las denuncias sobre la actuación del ayuntamiento en Vila Kennedy, favela de la zona oeste de Río que fue elegida como laboratorio de la intervención militar.
El sábado pasado publicó un texto en sus redes sociales en el que denunció abusos del 41 batallón de la Policía Militar contra vecinos de la favela de Acari, en la zona norte de la ciudad.
En el pasado, la concejala asesinada actuó en organizaciones como Brasil Foundation y Ceasm (Centro de Acciones Solidarias de Maré) y en la Alerj (Asamblea Legislativa de Río de Janeiro).
Marielle se convirtió en madre a los 19 años e inició su militancia en derechos humanos tras perder a una amiga "víctima de bala perdida en un tiroteo entre policías y traficantes en el Complejo de la Maré", lugar en el que nació y se crió.