Por Hu Yongqi
Beijing, 25/07/2018 (El Pueblo en Línea) - Las medidas de apoyo contribuirán a garantizar que cada trabajador tenga las habilidades necesarias para garantizar un empleo.
Los trabajadores afectados por la reestructuración industrial o las fricciones comerciales vigentes serán incluídos en el sistema de servicios públicos de capacitación y empleo de China, con el objetivo de ayudar a mejorar sus perspectivas laborales mientras que a los nuevos conductores del crecimiento se les ofrecerá mayor oportunidad de perfeccionamiento para que puedan acceder a empleos de alta calidad, asegura una nueva directriz.
Aunque el mercado laboral actual es estable, el documento está dirigido a contrarrestar los riesgos que plantean los desafíos que pueden derivarse de la reestructuración industrial interna, así como de las incertidumbres en el comercio internacional, afirmaron los expertos.
La citada directiva fue publicada la semana pasada por 17 departamentos del Consejo de Estado, liderados por la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma. El propósito es inyectar nueva vitalidad a la segunda economía más grande del mundo y mejorar la vida de las personas al asegurar el crecimiento de la economía real y sus ingresos.
La directriz de 10 cláusulas instó a desarrollar nuevos negocios, incluyendo la manufactura inteligente y la economía digital, transformar las industrias tradicionales y alentar a que las empresas emergentes proporcionen más empleos y de mayor calidad. También instó a acelerar la reforma estructural del sector de la oferta agrícola para formar a los nuevos agricultores. También se alienta que las personas inicien sus negocios después de regresar a sus hogares, mientras que la urbanización debe promoverse para expandir el empleo entre los que viven en las ciudades cercanas.
La nueva directriz es que se concertarán mayores esfuerzos para ayudar a las empresas que tienen tecnologías avanzadas a impulsar su mejoramiento industrial, a pesar de las dificultades temporales causadas por las fricciones comerciales.
Asimismo, se alentó a las empresas a que mantengan la nómina actual. Por otra parte, las subvenciones al empleo deben utilizarse para proteger a los trabajadores afectados por la reestructuración industrial y las fricciones comerciales.
El empleo es una prioridad para el gobierno central.
En los últimos cinco años, se crearon más de 66 millones nuevos puestos de trabajo en las zonas urbanas, detalló el Ministerio de Recursos Humanos y Seguridad Social.
El año pasado, el ingreso per cápita subió un 7,3 por ciento interanual, superando el crecimiento económico. A su vez, se crearon 13,51 millones de empleos para los residentes en zonas urbanas.
En el Informe sobre la Labor del Gobierno presentado en marzo de este año, el premier Li Keqiang anunció que el objetivo de este año es crear 11 millones de nuevos empleos en áreas urbanas y de mantener controlado el desempleo urbano dentro de un rango del 5,5 por ciento.
El premier Li añadió que el objetivo de crecimiento anual del PIB (6,5 por ciento) es capaz de asegurar el pleno empleo en China.
“Teniendo en cuenta la gran población trabajadora del país, las exportaciones contribuyen mucho al crecimiento económico y al mercado de trabajo”, indicó Chen Fengying, investigador principal de economía global en el Instituto de Relaciones Internacionales y Contemporáneas de China.
“Las fricciones comerciales pueden generar dificultades en la economía real, especialmente para algunos sectores manufactureros cuyos principales clientes son extranjeros”, añadió.
Las incertidumbres provocadas por el pulso comercial podrían perjudicar el empleo en China, ya que los fabricantes tendrán que reducir puestos de trabajo para enfrentar costos al alza y la reducción de beneficios.
“La directriz expresa formas detalladas de estimular la creación de empleo y mantener la estabilidad en el mercado laboral, manteniendo las expectativas del mercado y proporcionando medidas de apoyo”, subrayó Chen.
“Se puede considerar que es una medida decisiva para prevenir los riesgos de la ralentización dentro de la dinámica que crea nuevos puestos de trabajo”, agregó Chen y añadió que los objetivos de este año deberían cumplirse si todas las medidas se llevan a cabo correctamente.
Según la Oficina Nacional de Estadística de China, en la primera mitad de este año, el PIB creció un 6,8 por ciento.
De enero a mayo, las zonas urbanas verificaron 6,13 millones de nuevos puestos de trabajo, lo que presenta el 56 por ciento del objetivo de este año. Asimismo, se confirmó que 2,3 millones de desempleados urbanos encontraron el empleo.
A medida que el país continúa con el proceso de reformas administrativas y comerciales, emergen nuevos impulsores del crecimiento para incentivar el empleo dentro de un gran número de entidades de mercado recientemente registradas”, manifestó Mo Rong, presidente adjunto de la Academia China de Trabajo y Seguridad Social.
“Durante el primer trimestre se registraron 1,32 millones de nuevas empresas y las empresas establecidas aumentaron la capacidad de empleo”, concluyó Mo.
(Web editor: Rosa Liu, Rocío Huang)