Gobierno brasileño decreta la intervención federal integral en el estado fronterizo con Venezuela

Actualizado a las 08/12/2018 - 15:40

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RIO DE JANEIRO, 7 dic (Xinhua) -- El presidente de Brasil, Michel Temer, decretó hoy la intervención federal integral en el estado de Roraima (norte del país y fronterizo con Venezuela) hasta el próximo 31 de diciembre, después de que la policía, los bomberos y agentes penitenciarios anunciaran una huelga de 72 horas en protesta por los sueldos atrasados.

Según divulgó la Presidencia de Brasil, con la intervención integral, la gobernadora Suely Campos será apartada del cargo y sustituida por un interventor federal, que será el gobernador electo, Antonio Denarium, quien debería asumir el cargo el próximo 1 de enero.

El estado de Roraima vive una crisis social debido a los problemas en su sistema penitenciario, que se ha traducido en decenas de asesinatos en las cárceles de la región este año y decenas de fugas, así como por la llegada de inmigrantes venezolanos que han colapsado todos los servicios sociales de una de las regiones más pobres de Brasil.

Este viernes, la Justicia decretó la congelación de los sueldos de los trabajadores públicos de Roraima, agravando la situación y provocando que la policía, los bomberos y los agentes penitenciarios anunciaran que suspendían sus actividades durante 72 horas.

"Pacté con la señora gobernadora una especie de intervención negociada. Ella accedió a esta fórmula, y se mostró favorable con esta fórmula, cree que de hecho la situación se está complicando en el estado de Roraima y que la mejor solución sería precisamente esta", comentó el presidente Temer ante los medios.

El gobierno brasileño decretó el mes pasado la intervención en la seguridad pública por el riesgo de que se produjeran rebeliones en las cárceles del estado. Con ello, un interventor designado por el gobierno federal pasó a controlar la cartera de Seguridad Pública.

Roraima es el segundo estado de Brasil en ser intervenido este año, tras Río de Janeiro, que en febrero tuvo la Seguridad Pública intervenida para poner fin a la ola de violencia que vivía la región, la más turística del país.

Ello comportó que el Ejército pasara a asumir el control de las policías, los bomberos y el sistema penitenciario de Río de Janeiro, hasta el 31 de diciembre. El presidente electo, Jair Bolsonaro, ya anunció que no prorrogará la intervención federal en Río de Janeiro.