URUMQI, 19 dic (Xinhua) -- La región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste del país, ha cerrado 284 pozos petrolíferos con una producción anual de cerca de 70.000 toneladas para devolver terrenos a la fauna salvaje en la Reserva Natural de Kalamayli.
El centro de gestión de la reserva indicó que hasta el domingo, el campo petrolífero, que incluye tres grandes zonas de yacimientos, ha parado completamente su producción, a pesar de que la pérdida anual de la producción supone más de 300 millones de yuanes (43,5 millones de dólares).
Como resultado, una superficie de 352.000 metros cuadrados ha sido recuparada en la reserva, según el centro.
"Ahora no hay pozos petrolíferos en la reserva, al contrario que hace dos años, cuando estaba plagado de pozos", señaló Peng Xiangqian, un ingeniero sénior en el centro.
La Reserva Natural de Kalamayili, que fue establecida en 1982, es la tercera más grande de China. Discurre a lo largo de la parte oriental de la cuenca de Junggar y alberga a varias especies en peligro de extinción, entre ellas los onagros y las gacelas de cola negra.
La planta de producción petrolera Zhundong, afiliada a la sucursal de Xinjiang de PetroChina, indicó que ha desmantelado los yacimientos petrolíferos y enviado todo el equipamiento de bombeo a los centros de reciclaje local.
La compañía también ha rehecho las bases de algunas instalaciones de bombeo en la cuenca donde los animales pueden beber agua.
La planta ha invertido más de 800 millones de yuanes en la exploración de petróleo y construcción de instalaciones durante las décadas recientes. La clausura de los pozos petrolíferos le cuesta otros 200 millones de yuanes.
La exploración y explotación petroleras en la región comenzó en la década de los 50 del siglo pasado. Esta actividad ha sido culpada de dañar la flora local y expulsar a los animales de la reserva.
La explotación y producción petroleras comenzaron a ser retiradas gradualmente de la reserva desde 2016.