BEIJING, 25 abr (Xinhua) -- Hace siglos, a lomos de camellos y en barcos, a través de desiertos abrasados por el sol y olas turbulentas, los mercaderes y exploradores viajaban de un lado a otro a lo largo de la antigua Ruta de la Seda marítima y galvanizaban el comercio y el contacto entre oriente y occidente.
Hoy, China, inspirada por el legado de esta ruta comercial histórica, ha propuesto la Iniciativa de la Franja y la Ruta, que busca unir los esfuerzos del mundo para abrir un nuevo camino hacia el desarrollo compartido y la prosperidad común.
La iniciativa ha cosechado resultados tangibles en los seis años desde su nacimiento en 2013. También ha acumulado apoyo mundial. Hasta el momento, 126 países y 29 organizaciones internacionales se han adherido a la iniciativa.
La cooperación floreciente de la Franja y la Ruta a lo largo de los años ha ayudado a fomentar flujos comerciales y de inversión más rápidos, ha permitido un acceso financiero más fácil y ha creado intercambios más extensos de personas en Asia, Europa, África y más allá.
Hay algunas razones detrás de la productividad y popularidad de la Franja y la Ruta. En primer lugar, se deriva del espíritu de apertura, inclusión y beneficio mutuo.
Hace dos años, al abordar la apertura del primer Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, el presidente chino, Xi Jinping, dijo: "Estamos listos para compartir prácticas de desarrollo con otros países, pero no tenemos intención de interferir en los asuntos internos de otros países, exportar nuestro propio sistema social y modelo de desarrollo, o imponer nuestra propia voluntad a los demás".
Y agregó que "en la aplicación de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, no recurriremos a maniobras geopolíticas obsoletas".
En el marco de la cooperación de la Franja y la Ruta, China ha defendido y practicado el principio de "consulta extensa, desarrollo conjunto y beneficios compartidos", buscando el autodesarrollo y al mismo tiempo brindando oportunidades, experiencia y capital a sus socios de la Franja y la Ruta y al mundo en general.
Como testimonio de la relevancia y la importancia de la Franja y la Ruta en el mundo actual, su visión se ha incluido en documentos de las principales instituciones internacionales y plataformas de cooperación, incluyendo las Naciones Unidas, el Grupo de los 20, la Cooperación Económica Asia-Pacífico y la Organización de Cooperación de Shanghai.
En segundo lugar, la Franja y la Ruta proporciona una plataforma para fomentar vínculos más estrechos entre países.
Guiada por el espíritu de la Ruta de la Seda, la iniciativa apunta a promover la cooperación en cinco áreas principales: coordinación de políticas, conectividad de infraestructuras, comercio, finanzas e intercambios entre personas.
La coordinación de políticas es clave para una cooperación fluida. Beijing nunca intenta imponer la Franja y la Ruta a otros, pero presta mucha atención a alinear la iniciativa con las estrategias de desarrollo de sus socios en la iniciativa.
Hasta ahora, ha firmado acuerdos de política con otros participantes de la Franja y la Ruta sobre normas y estándares, impuestos, protección de la propiedad intelectual y solución de controversias.
El desarrollo de la infraestructura también ha hecho notables avances. En Grecia, co-administrado por Cosco Shipping de China, el puerto de Piraeus ha visto multiplicarse por cinco su capacidad de manejo de contenedores desde 2010 a 4,9 millones de TEU el año pasado.
Ahora se ubica en el puesto 36 entre los 100 puertos principales del mundo en la Lista de Lloyd, un parámetro importante de la industria, en comparación con el 93 cuando Cosco Shipping se unió por primera vez. Otros proyectos de conectividad en áreas que incluyen ferrocarriles, carreteras, transporte aéreo, energía y telecomunicaciones también han hecho progresos visibles.
Estos proyectos han brindado oportunidades de negocios no solo para las empresas chinas, sino también para las empresas de todo el mundo.
Por ejemplo, en la construcción de un corredor eólico en la provincia paquistaní de Sindh, el conglomerado multinacional estadounidense General Electric está contratado para trabajar con PowerChina y proporcionar turbinas eólicas. La compañía estadounidense también proporcionará 10 años de servicios de operación y mantenimiento.
Gracias a los trenes de carga de China Railway Express que viajan entre China y Europa, las empresas chinas registradas en la ciudad de Duisburg, en el oeste de Alemania, han crecido de aproximadamente 40 en 2014 a más de 100 en la actualidad. Los servicios de carga han aumentado de tres trenes por semana a alrededor de 40, estimulando el crecimiento económico local y creando más de 6.000 empleos.
En cuanto a la cooperación financiera, China trabaja con sus socios de la Franja y la Ruta y las principales instituciones financieras mundiales para garantizar un flujo de fondos diversificado y sólido para proyectos clave relacionados con la iniciativa.
Desde su lanzamiento en 2016, el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII) se ha convertido en una de las plataformas multilaterales clave para la construcción de la Franja y la Ruta, y ha ganado una creciente confianza y reconocimiento a nivel mundial.
A fines de 2018, el BAII tenía 93 miembros y había aprobado préstamos por 7.500 millones de dólares estadounidenses en 35 proyectos en 13 países, entre ellos Indonesia, Pakistán, Tayikistán, Azerbaiyán, Omán, Turquía y Egipto.
En tercer lugar, la Franja y la Ruta está tratando de ayudar a trazar un nuevo camino hacia un comercio mundial más próspero, una economía mundial más abierta y una globalización económica más inclusiva.
En los últimos seis años, el comercio total entre China y otros países que participan en la Franja y la Ruta ha superado los seis billones de dólares, y la inversión de China en estos países ha superado los 80 mil millones de dólares.
Además, los últimos estudios realizados por el Banco Mundial (BM) y otras instituciones internacionales muestran que la cooperación de la Franja y la Ruta reducirá los costos del comercio global entre un 1,1 y un 2,2 por ciento y contribuirá al menos con un 0,1 por ciento del crecimiento mundial en 2019.
Asimismo, la Franja y la Ruta está marcando una diferencia que la gente común puede sentir. Un informe reciente del BM muestra que las inversiones relacionadas con la Franja y la Ruta pueden ayudar a sacar a 8,7 millones de personas de la pobreza extrema y a 34 millones de la pobreza moderada en diversos países.
Los 82 parques de cooperación construidos conjuntamente por China y los 24 países participantes han creado más de 2.000 millones de dólares en ingresos fiscales y unos 300.000 empleos para los países anfitriones.
En un seminario que conmemora el quinto aniversario de la Franja y la Ruta en agosto pasado, Xi dijo que la iniciativa esbozó una "pincelada a mano alzada" y ahora es el momento de elaborar una "pintura meticulosa" y dirigir la cooperación de la Franja y la Ruta hacia un desarrollo basado en la calidad.
El II Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, que comenzó el jueves en Beijing, ofrece una oportunidad para que los escépticos comprendan mejor por qué la iniciativa ha despertado el interés en todo el mundo, y son bienvenidos a participar.