Madrid, 18/07/2019 (El Pueblo en Línea) - Este jueves arranca el Open en Royal Portrush, Irlanda del Norte. Y Phil Mickelson está decidido a un "reseteo", una manera de dejar atrás los malos resultados y, sobre todo, ponerse a tono físicamente para aprovechar su último tramo como jugador regular del PGA Tour, destaca Yahoo Noticias.
Sucede que el golfista que estuvo más semanas como número 2 del mundo (270) sin llegar a alcanzar la cima del ranking, no puede salir de un gran bajón. Los números lo dicen todo: en sus últimos 12 torneos, desde que ganó en Pebble Beach en febrero pasado, no superó seis cortes y, salvo en el Masters, decimoctavo, no pasó del puesto 37. Además, padecía sobrepeso.
Al borde de los 50 años, siente que su swing no fluye con la naturalidad que lo llevó a ganar cinco majors -incluido el Open de 2013- y que no puede ser "el animal competitivo" que fue siempre. Por eso tomó una decisión drástica, más allá de la práctica: se sometió a una estricta dieta que ya le dio resultados. El proceso lo relató en las redes sociales.
El zurdo contó que en los últimos tiempos se recluyó y no quiso mostrarse en público ni en las redes, que se "reinició" para tratar de mejorar su vida y que perdió 15 libras (algo menos de 7 kilos) realizando seis días de ayuno solo con agua y una mezcla especial de café blend.
Los resultados ya se notan: se le ve con una figura más estilizada, después de bajar de 94 kilos a 87 en un total de 10 días. Después, su regreso a la comida sólida consistió en verdura, fruta, nueces y semillas. Además le añadió el yoga a su actividad diaria y cree que su cabeza ya tiene un mejor foco.
Solo queda comprobar si esa mejora en su contextura física se traslada a su juego.