Beijing, 14/08/2019 (El Pueblo en Línea) - Cualquier intento de poner en peligro la soberanía y la seguridad nacionales, desafiar el poder del gobierno central y la autoridad de la Ley Básica de la RAEHK o utilizar a Hong Kong para llevar a cabo actividades de infiltración y sabotaje contra China continental es un acto que cruza la línea roja y es absolutamente inadmisible, afirmó el presidente Xi Jinping durante el acto de conmemoración del veinte aniversario del regreso de Hong Kong a la patria.
La línea roja de la soberanía de China siempre ha estado clara. Los ultrarradicales la desafían deliberadamente en un intento por destruir el orden constitucional y despejar el camino hacia una "revolución del color".
En los últimos meses, los alborotadores han organizado manifestaciones, asediado y entrado en el Consejo Legislativo, han destrozado la Oficina de Enlace del Gobierno Central en la RAEHK y han agredido a agentes de la policía e individuos.
Estos actos violentos han sido bien organizados y planificados. Los alborotadores crean el "terror negro" que apunta a las masas, y sueñan despiertos que pueden arrastrar a Hong Kong hacia el abismo.
Además, los alborotadores creen erróneamente que las "cinco grandes demandas" que plantean son representativas de la voluntad popular de Hong Kong.
Sin embargo, la retirada permanente del Proyecto de Ley de Extradición es una petición que carece de sentido. Asimismo, la liberación sin cargos de los manifestantes detenidos y la eliminación de la caracterización de la protesta del 12 de junio como un motín son demandas irrazonables. Por otra parte, la creación de una comisión independiente para la investigación y el sufragio universal completo constituyen una violación del Estado de Derecho y atenta contra el consenso de toda la sociedad.
El orden jurídico y constitucional no puede quebrarse.
Las reglas son las reglas. Cualquier intento de cruzar o romper la línea roja debe estar prohibido. La estricta aplicación de la ley de la policía es el primer paso, y la justicia dura de los jueces en Hong Kong es el segundo paso. La policía y el sistema judicial comparten la misma misión de combatir a los alborotadores.
En el juicio del movimiento ilegal "Occupy Central", un juez aseguró que se puede "lograr justicia violando la ley", ejerciendo prácticas insalubres y y abuso verbal sobre otros jueces, lo cual resulta inaceptable.
En el futuro, no habrá violencia en la ciudad de la paz y la prosperidad, siempre y cuando las fuerzas policiales hagan todo lo posible para proteger a Hong Kong y los jueces demuestren la espada de la justicia contra estos alborotadores.
La justicia prevalece sobre el mal y los alborotadores engrosarán el salón de la vergüenza de Hong Kong.
(Web editor: 实习生, Rosa Liu)