Foto: www.pixabay.com
Por He Yin
Beijing, 01/04/2020 (El Pueblo en Línea) - El brote repentino de neumonía por el nuevo coronavirus está afectando las cadenas mundiales industriales y de suministro y el comercio en todo el mundo. El 30 de marzo, la reunión especial de los ministros de Comercio e Inversión del G20 emitió una declaración conjunta que responde al consenso alcanzado durante la Cumbre Virtual Extraordinaria de Líderes del G20 sobre COVID-19, enfatizando que las medidas de emergencia deben ser apropriadas, transparentes y temporales para evitar obstáculos innecesarios al comercio internacional o efectos destructivos en las cadenas mundiales industriales y de suministro. El consenso revela que también es imperativo que todos los países se unan para reducir el impacto de la pandemia en la economía mundial.
En la era de la globalización económica, todas las economías mundiales comparten el mismo destino en la división del trabajo y la cooperación globales. Actualmente, la epidemia de COVID-19 ha causado múltiples "obstrucciones" a las cadenas mundiales industriales y de suministro, causando interrupciones en el comercio internacional y la inversión.
El informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo revela que esta epidemia podría conducir a una disminución global de la inversión extranjera directa de hasta un 40% este año. Al mismo tiempo, la demanda de materiales antiepidemiológicos se ha disparado en varios países, convirtiendo la producción y circulación de estos materiales en una cuestión de vida o muerte. La coordinación de las medidas de respuesta, los esfuerzos conjuntos en la preparación de macro-políticas, la mitigación del impacto general de la epidemia, la lucha para garantizar un entorno de mercado libre, justo, no discriminatorio, transparente, predecible y estable son opciones que deben ser adaptadas por todos los países.
En este momento crítico, asegurar flujos de inversión y apertura de comercio para suministrar productos suficientes a precios justos es vital para la recuperación económica global. Como el director general de la Organización Mundial de Comercio, Roberto Azevedo, enfatizó: "Ningún país puede ser autosuficiente, sin importar lo fuerte que sea". Las personas son cada vez más conscientes de la importancia de tomar medidas conjuntas para reducir los aranceles y eliminar las barreras como una forma de medir las responsabilidades internacionales.
Como un país importante en las cadenas mundiales industriales y de suministro, China siempre se ha adherido a su compromiso de apertura y cooperación, brindando apoyo práctico a los países para trabajar y coordinar respuestas a la lucha contra la epidemia. A medida que su situación de epidemia interna continúa mejorando y el orden económico y social se acelera, China continúa expandiendo la producción de materiales de prevención de la epidemia, aportando las garantías necesarias para sí misma y para el resto del mundo.
Por ejemplo, como un proveedor importante en el mercado global, la industria farmacéutica de China ha reanudado la producción y los rendimientos de sus principales productos han excedido el 80%. La producción de ropa protectora médica en China se ha multiplicado por 40 veces en solo dos meses. El volumen de entrega diaria de sensores de temperatura infrarrojos ha aumentado de 15.000 a alrededor de 200.000 unidades. Desde el 19 de marzo, protegiendo la demanda interna, China ha suministrado urgentemente más de 1.700 respiradores a países extranjeros y ha recibido pedidos com un total de 20.000 unidades. La productividad de China se convirtió rápidamente en una fuerza para combatir la epidemia, y el ciclo interno de la economía china ayudó a las cadenas mundiales industriales y de suministro.
La cooperación abierta es una necesidad objetiva que cumple con las leyes de operación de la economía mundial. Es un arma importante para disipar la niebla de la epidemia. Aunque algunas personas, en algunos países, han usado la epidemia para promover tesis de "desacoplamiento económico", alegando que cambian la cadena industrial e incluso tratando de cortar artificialmente las cadenas mundiales industriales y de suministro, debe tenerse en cuenta que cualquier ilusión en este sentido va en contra de la tendencia de los tiempos. Los resultados de una encuesta reciente publicada por la Cámara de Comercio de Estados Unidos en China muestran que, a largo plazo, China sigue siendo el principal mercado para la mayoría de las empresas estadounidenses con sede en el país. China es reconocida como un país industrial importante y un importante productor y exportador de productos para la prevención de epidemia y suministros médicos. La efectividad de la lucha del país contra la epidemia y el suministro de materiales antiepidémicos demuestran que es una fuerza indispensable e importante en las cadenas mundiales industriales y de suministro.
Todos los países del mundo deben unir sus manos para dar lo mejor de sí, mostrar sus puntos fuertes, proteger la vida y contribuir al desarrollo común.
(Web editor: 吴思萱, 赵健)