(Foto:Xinhua)
Beijing, 23/04/2020 (El Pueblo en Línea) - Con la pandemia provocada por el SARS-CoV-2 causando estragos mundiales, desde la Casa Blanca han corrido rumores - que han sido amplificados por algunos medios de comunicación estadounidenses- de que el SARS-CoV-2 podría haber sido sintetizado artificialmente en el laboratorio chino de bioinvestigación de Wuhan. Sin embargo, aunque esta teoría de la conspiración ya ha sido desacreditada por personalidades científicas de todo el mundo, actualmente hay más evidencias científicas que salen a la luz que refuerzan el origen natural del letal virus.
Una reciente investigación llevada a cabo por algunos de los principales cazadores de virus del mundo afirma que el SARS-CoV-2 -el nuevo coronavirus que causa la enfermedad COVID-19- no demuestra ninguna evidencia de haber sido manipulado artificialmente, informó Nature Medicine el 17 de marzo.
Esta investigación incluyó a científicos de Scripps Research, de la Universidad de Sydney (Australia) y de varias universidades de Estados Unidos, como la Universidad de Tulane en Nueva Orleans.
Después de analizar los datos de la secuencia del genoma público del SARS-CoV-2 y los virus relacionados, los científicos no encontraron ninguna evidencia de que el SARS-CoV-2 se haya fabricado en un laboratorio o se haya manipulado.
"Comparando los datos de secuencia del genoma disponibles para las cepas de coronavirus conocidas, podemos determinar con firmeza que el SARS-CoV-2 se originó a través de procesos naturales", precisó el Dr. Kristian Andersen, profesor asociado de inmunología y microbiología en Scripps Research y autor principal de la publicación.
La investigación concluyó que los orígenes más probables del SARS-CoV-2 se podrían haber originado de dos maneras. Una de ellas, el virus evolucionó hasta su estado patógeno actual a través de la selección natural dentro de un huésped no humano y luego saltó a los seres humanos. En el otro escenario propuesto, una versión no patógena del virus saltó de un huésped animal a un humano, y luego evolucionó hasta su estado patógeno actual dentro de la población humana.
Ante los rumores que han estado circulando sobre los orígenes del nuevo virus, estos hallazgos son de crucial importancia para aportar una visión basada en la evidencia científica, afirmó el Dr. Josie Golding, líder de epidemias en el Wellcome Trust, con sede en Reino Unido.
"No hay razón para creer que el SARS-CoV-2 se creó en un laboratorio", concluyó el Dr. Robert Shafer, profesor de Enfermedades Infecciosas de la Escuela de Medicina de Stanford, durante una entrevista con ABC News.
"Hay muchas cepas en la naturaleza que podrían causar este tipo de brote", subrayó Shafer.
El Dr. Robert Garry, profesor de la Escuela de Medicina de Tulane, considera que no es realmente cierto que el trabajo de laboratorio haya creado la mutación SARS-CoV-2, aunque algunas personas especulen al respecto.
"Cuando pasas el virus (con esa mutación) a través de cultivos celulares, lo pierdes. Entonces está claro que esa no es la forma en que podría haberse generado", explicó el Dr. Garry a ABC News.
El Dr. John Ionnidis, profesor de prevención de enfermedades de la Escuela de Medicina de Stanford, asegura que el SARS-CoV-2 que causa el COVID-19 ni se comporta ni se ve sintético. "Si fuera creado por el hombre, no se expresaría de la forma que lo hace".
Estas infundadas teorías de la conspiración no han logrado ganar terreno en la comunidad científica, precisó el Dr. Ionnidis, señalando que el único documento "científico" que sembraba dudas sobre los orígenes naturales del SARS-CoV-2 fue retirado debido a las duras críticas de la comunidad científica internacional.
El 17 de abril, France 24 reportó que hasta el momento no había pruebas objetivas de un vínculo entre el SARS-CoV-2 y la labor del laboratorio de Wuhan, que el país galo ayudó a establecer. Alain Merieux, fundador de una empresa bioindustrial francesa, fue el consultor de la etapa constructiva del laboratorio de investigación de Wuhan.
"Quisiéramos dejar claro que a día de hoy no existen pruebas objetivas que corroboren los recientes despachos noticiosos emitidos desde la prensa estadounidense que aspiran a vincular los orígenes del SARS-CoV-2 con el trabajo del laboratorio de Wuhan", reafirmó un funcionario de la oficina del presidente Emmanuel Macron.
El laboratorio de investigación de Wuhan, diana de las disparatadas teorías de la conspiración, se terminó en el 2015 y se inauguró en el 2018.
(Web editor: 吴思萱, 赵健)