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El nuevo gobierno de EE.UU. no será una cura para los problemas de su sociedad

Pueblo en Línea  2021:01:26.09:45

El nuevo gobierno de EE.UU. no es una cura para los problemas de su sociedad

Por Li Haidong

Beijing, 26/01/2021 (El Pueblo en Línea) - El 20 de enero, el presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, tomó posesión con la Guardia Nacional en alerta máxima. En los últimos cuatro años, Estados Unidos ha encendido la luz roja en varios campos como la epidemia, la economía, el racismo y la diplomacia. La escena en la que Trump incitó a sus partidarios a atacar el Capitolio el 6 de enero muestra la continua y profunda confrontación en la política estadounidense este año, y muestra a fondo la realidad de una sociedad estadounidense desgarrada.

En primer lugar, Estados Unidos se encuentra en un estado profundo de valores perdidos. La identidad del pueblo y la identidad nacional están en un estado de extrema confusión, y es difícil formar una "sinergia espiritual" que se una en respuesta a desafíos difíciles. Durante mucho tiempo, el "horno" estadounidense que integra a diferentes grupos de inmigrantes y reconoce el dominio de blancos y cristianos ha sido reemplazado por una cultura de pluralismo que enfatiza el idioma, la religión y las costumbres de los inmigrantes. “Valorar la diversidad y la convivencia armónica”, el rasgo social de Estados Unidos que anuncia la superioridad del país, está mostrando un enfrentamiento cada vez más agudo entre valores debido al desgarro de los grupos étnicos. La Constitución de Estados Unidos, que sentó las bases del sistema político del país, ha hecho que cada vez más grupos étnicos cuestionen su legitimidad porque la mayoría de sus creadores eran gente blanca y dueños de esclavos. Trump, que defiende la supremacía blanca y el dominio del cristianismo, ha seguido intensificando los conflictos entre los blancos y otros grupos étnicos con sus políticas en áreas como la inmigración y la raza. La extrema confusión de valores ha dejado a Estados Unidos en un estado de "alma en vilo" deambulando como un "fantasma". El camino hacia la reconstrucción de los valores pluralistas planeado por el nuevo gobierno de Estados Unidos seguramente se encontrará con la resistencia de grupos supremacistas blancos que han recibido apoyos en los últimos cuatro años. El camino del nuevo gobierno para restaurar el "alma estadounidense" es difícil de lograr.

En segundo lugar, la "polarización" de la política estadounidense y la degradación de la clase media han llevado a la proliferación del populismo anti-élite y anti-establishment. En el pasado, la clase media, que aseguraba la estabilidad en Estados Unidos por ser la mayoría de la población, ha cambiado, y la mayoría de la gente ha pasado a ser de bajos ingresos. El injusto fenómeno de que la riqueza nacional esté en manos de unas pocas personas, ha llevado a la extrema insatisfacción del público estadounidense con la élite política y el sistema existente. Toda la sociedad es hostil, las fuerzas populistas están exaltadas y los especuladores políticos emergen en una corriente interminable. Desde el final de la Guerra Fría, las diferencias entre los partidos demócrata y republicano en temas importantes relacionados con el seguro médico, los impuestos, la inmigración y la diplomacia han seguido aumentando. La rotación de los dos partidos en el poder no solo no ha logrado avanzar en el proceso de reconciliación política, sino que ha generado un círculo vicioso de ataques mutuos en el campo de las políticas. Ambos partidos también están experimentando cambios profundos en las facciones políticas extremistas y el declive centrista. En cuanto al tema fundamental de cómo se gobierna Estados Unidos, las propuestas de política entre los partidos políticos y las facciones dentro de cada partido son fuertemente opuestas, lo que ha traído las consecuencias del desorden político y el declive en Estados Unidos. La política partidista no presta atención al bienestar de las personas y se ha convertido en una herramienta para agravar los conflictos sociales. En una atmósfera muy dividida y políticamente mórbida, se ha vuelto más difícil para el nuevo gobierno estadounidense implementar políticas importantes.

En tercer lugar, la administración Trump ha agravado el legado político que divide a Estados Unidos y ha hecho más difícil para la nueva administración poner fin al caos. La administración Trump restringe la inmigración, promueve la supremacía blanca, promueve el proteccionismo comercial anti-globalización y la inmunidad colectiva para combatir la epidemia. Además, muchas otras políticas han provocado una intensificación de los conflictos étnicos en Estados Unidos, un continuo antagonismo de clases, daños a la reputación internacional y personas infectadas. Todo ello supone un final decepcionante para este gobierno federal. Antes de dejar el cargo, la administración Trump introdujo de manera intensiva varias políticas e incitó a sus partidarios a desafiar los resultados de las elecciones, envenenando el entorno gobernante del nuevo gobierno poniendo todas las trabas posibles. Si no consigue romper el legado de políticas tóxicas del predecesor y lograr resultados de políticas específicas en los dos próximos años de mandato, el nuevo gobierno, que se enfrentará a muchos desafíos graves en el país y en el extranjero, tendrá dificultades para llevar al partido demócrata a ganar las elecciones legislativas de mitad de legislatura en 2022 y las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2024. El diseño del sistema de elecciones frecuentes en Estados Unidos dificulta que cualquiera pueda asumir el cargo para resolver fundamentalmente los abusos acumulados, y solo puede controlar temporalmente los serios problemas en Estados Unidos a través de consideraciones políticas a corto plazo.

En general, Estados Unidos se encuentra actualmente en la encrucijada de la elección del camino de "a dónde dirigirse". La nueva administración ofrece una oportunidad para "corregir" las destructivas políticas internas y externas de la administración Trump, pero el entorno de la política y la sociedad estadounidenses se encuentra en un estado demasiado grave y es probable que continúe el proceso de "decadencia política" (Political Decay)en Estados Unidos.

 (El autor es profesor del Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad de Asuntos Exteriores de China)

(Web editor: 赵健, 周雨)

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