MA XUEJING / CHINA DAILY
Por José Luis Centella Gómez
Debemos comprender lo que ha hecho el PCCh para garantizar el éxito del país en la lucha contra la pobreza.
Este año marca el centenario de la fundación del Partido Comunista de China. Para comprender los logros de la República Popular China en la lucha contra la pobreza, debemos remontarnos a 1949, cuando el entonces presidente Mao Zedong proclamó la fundación de la República Popular de China.
La lucha contra la pobreza ha sido el foco especial del Partido desde el momento de la construcción de la República Popular de China, y el objetivo siempre ha sido traer mejoras significativas en la calidad de vida de las personas.
Cuando el exlíder chino Deng Xiaoping planteó la política de reforma y apertura en 1978, muy pocas personas en el mundo creían que China sería capaz de eliminar la pobreza en tan poco tiempo. Su éxito en la erradicación de la pobreza en China es uno de los mayores logros en la historia de la humanidad y, sin duda, el avance social más importante hasta ahora en el siglo XXI.
La experiencia de China nos permite entender que el objetivo del socialismo debe colocar siempre al ser humano en el centro de todas las acciones políticas, económicas y sociales, subordinando el beneficio económico particular al interés general de la comunidad. Desde esa perspectiva, podría ser pertinente resaltar algunos temas que podrían ser importantes como contribución al desarrollo del marxismo.
De suma importancia ha sido la combinación de China del desarrollo de una economía de mercado socialista con los planes quinquenales para lograr la primacía del interés general.
Tal modelo de economía de mercado socialista nos enseña la posibilidad de aprovechar el dinamismo que el mercado puede generar en determinados sectores de la economía. Utiliza tales ventajas para el bienestar de la mayoría de la población, como se ha demostrado en el desarrollo del sector agrícola y la mejora de las zonas rurales.
Esta planificación económica es el sello distintivo del socialismo con características chinas, que se diferencia de una economía de mercado capitalista en que pone al Estado al servicio del beneficio económico de unos pocos, sin dejar de lado el interés general.
Es necesario comprender que los logros de China en su lucha contra la pobreza no son solo resultado de su crecimiento económico, sino también de la aplicación de una serie de conceptos políticos y filosóficos. Estos pueden especificarse como contribuciones del pensamiento político de China.
Si bien el desarrollo económico y la aplicación de principios filosóficos son un arma en la lucha contra la pobreza, también es necesario tener en cuenta la necesidad de lograr la paz en el mundo. No podemos olvidar que las guerras y los enfrentamientos violentos son una de las principales causas de la pobreza en gran parte del mundo. Por ello, debemos valorar la actualización de los Cinco Principios de Convivencia Pacífica, que están siendo implementados por el presidente Xi Jinping, quien propone construir una comunidad global con un destino común con el propósito de reducir las diferencias entre países ricos y pobres.
En este marco, la iniciativa de la Franja y la Ruta representa un valioso aporte a las relaciones internacionales porque es una iniciativa que une, en un mismo proyecto, la cooperación cultural, social, económica y comercial basada en principios igualitarios que impiden el regreso a la Guerra Fría. En definitiva, marca un nuevo punto en la historia, allanando el camino para la multipolaridad, la diversidad y el desarrollo equilibrado y sostenible. Ciertamente, la iniciativa busca la mejor manera de construir un mundo pacífico.
Es necesario construir un sistema basado en beneficios mutuos y relaciones económicas saludables. Es imprescindible resaltar las políticas sociales que no marginan a nadie y que acaben con la pobreza extrema, llevándonos a dar pasos hacia un nuevo mundo multipolar. Una salida más rápida de la situación actual, donde la unipolaridad asoma la cabeza, solo es posible mediante la cooperación. La posibilidad de compartir recursos beneficiará a toda la humanidad, al tiempo que se hacen realidad los objetivos de la Carta de las Naciones Unidas de lograr el desarrollo pacífico de todos los pueblos del mundo.
El autor es presidente del Partido Comunista de España. El autor escribió este artículo para China Daily. Las opiniones no reflejan necesariamente las de Pueblo en Línea.
(Web editor: 吴思萱, 赵健)