Hace un siglo, el Partido Comunista de China (PCCh) nació cuando la supervivencia de la nación estaba en juego. Durante los últimos cien años, el PCCh, al frente del pueblo y a través de una lucha extraordinariamente ardua, fundó la nueva China, abrió el camino de desarrollo del socialismo con peculiaridades chinas y condujo al país a lograr el salto histórico de la puesta en pie, la prosperidad modesta y la fortaleza naciente. Comprometido a la felicidad del pueblo, la revitalización de la nación y el bien común del mundo, el PCCh, con su sabiduría política y experiencias de gobernanza, no solo ha traído beneficios al pueblo chino, sino que también ofrece una importante referencia a otros países.
Puesta en pie
Después de 1840, China sufrió repetidas agresiones de potencias extranjeras. Para salvar la nación, las diferentes fuerzas políticas, en busca de un camino a seguir, probaron distintas “prescripciones”, tales como la monarquía constitucional, el sistema presidencial, el parlamentario y el multipartidista, pero ninguna funcionó. Fue el PCCh, fundado en 1921, el que combinó el marxismo con las realidades chinas, salvó la nación y lideró al pueblo chino a alcanzar la independencia nacional y construir la República Popular China, poniendo fin definitivo a la sociedad semicolonial y semifeudal y a la fragmentación prolongada de la antigua China. Finalmente, al igual que otras naciones del mundo, China logró ponerse en pie.
Desde entonces, China ha venido apoyando activamente la causa justa de los países en desarrollo de salvaguardar su dignidad y soberanía nacionales. Poco después del movimiento popular de Panamá para izar su bandera nacional en la Zona del Canal, Diario del Pueblo publicó el artículo “El Pueblo Chino Apoya con Toda Firmeza la Lucha Patriótica y Justa del Pueblo Panameño”, declarando que “El pueblo chino está del lado del pueblo panameño y apoya su justa acción para oponerse a los invasores estadounidenses y reclamar la recuperación de su soberanía sobre la Zona del Canal”. 16 millones de chinos participaron en las manifestaciones en distintos lugares del país para solidarizarse con el pueblo panameño. Asimismo, el pueblo chino siempre se ha pronunciado a favor de las causas justas de los países en desarrollo, como exigir a EE.UU. que ponga fin al bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba y respaldar el reclamo soberano de la Argentina sobre las Islas Malvinas.
Prosperidad modesta
Bajo el liderazgo del PCCh, el pueblo chino ha pasado de vivir en pobreza a tener garantizadas sus necesidades básicas, y ahora lleva una vida modestamente acomodada. Ha eliminado completamente, por primera vez en la historia, la pobreza absoluta, cumpliendo con diez años de antelación el objetivo de reducción de pobreza establecido en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU. China ha hecho realidad el despegue económico, y ha establecido el sistema industrial moderno más completo del mundo, materializado en tan solo unas décadas la industrialización que los países desarrollados occidentales tardaron varios siglos en culminar. Desde 1952 hasta 2020, el PIB de China ha ascendido de los 67.900 millones de yuanes a los 101,590 billones de yuanes, y el PIB per cápita, de 119 yuanes a 72.400 yuanes. En China, se ha formado el grupo de renta media más grande del mundo, con más de 400 millones de personas. Además, China ha establecido el sistema educativo, médico y de seguridad social más grandes del mundo. Lejos de ser aquel país pobre y atrasado, la China de hoy ya es la segunda economía del mundo, el mayor país industrial, el que tiene el mayor volumen de comercio de mercancías, el que cuenta con más reserva de divisas y el mayor receptor de inversiones extranjeras.
Como el mayor país en desarrollo, China no escatima esfuerzos para promover la prosperidad común de todos los países. Las prácticas chinas en la reducción de pobreza aportan soluciones al mundo entero. China ha establecido sucesivamente mecanismos de cooperación como el Fondo de Paz y Desarrollo China-ONU, el Fondo para la Cooperación Sur-Sur y el Programa de Reducción de la Pobreza y Cooperación Popular China-África. Ha proporcionado apoyo a países en vías de desarrollo a través de 100 proyectos de cooperación en seis aspectos determinados incluyendo el alivio de la pobreza. Todo esto ha promovido en gran medida la reducción de pobreza a nivel mundial. Al mismo tiempo, China ha implementado la Iniciativa del G20 sobre la Suspensión del Servicio de la Deuda a favor de los países más pobres con el mayor volumen suspendido entre los miembros del G20. Lleva más de 10 años consecutivos con una tasa de contribución al crecimiento económico mundial de más del 30%. Según un informe del Banco Mundial, para el año 2030, la iniciativa de la Franja y la Ruta sacará a 7,6 millones de personas de la pobreza extrema y a 32 millones de la pobreza moderada.
Fortaleza naciente
El PCCh es un partido político que busca la felicidad del pueblo chino y el progreso de la humanidad. El PCCh ha plasmado en sus Estatutos el solemne compromiso de promover la construcción de la comunidad de futuro compartido de la humanidad y abogar por un mundo armonioso de paz duradera y prosperidad compartida. El PCCh siempre toma como su misión el aportar nuevas y mayores contribuciones a la humanidad, y tiene como objetivo fundamental promover una diplomacia de gran país con peculiaridades chinas de la nueva era, fomentando la construcción de una comunidad de futuro compartido de la humanidad.
Frente al repentino estallido de la epidemia de COVID-19, el PCCh, valiéndose de su fuerte capacidad organizativa, movilizadora y ejecutiva, puso la vida del pueblo por encima de todo y adoptó rigurosos protocolos antiepidémicos, así como enérgicas medidas de control, logrando así recuperar el orden de la producción y la vida con la mayor brevedad posible, además de proteger la salud del pueblo chino. Además de llevar a cabo coordinadamente su propio control epidemiológico y desarrollo socioeconómico, China desarrolla activamente la cooperación antiepidémica internacional. Ha brindado asistencia de productos médicos a más de 150 países y 13 organizaciones internacionales, ha llevado a cabo cooperación en investigación, desarrollo y producción de vacunas con muchos países y ha proporcionado más de 300 millones de dosis de vacunas a otros países pese a sus propias dificultades. Respondiendo al llamamiento de la ONU, China ha donado vacunas al personal de mantenimiento de la paz, y en cooperación con el Comité Olímpico Internacional, ha ofrecido vacunas a los deportistas participantes en los Juegos Olímpicos. Con estas acciones reales, China apoya enérgicamente el control de la pandemia a nivel global y hace valer el concepto de la comunidad de futuro compartido de la humanidad.
El centenario marca un nuevo punto de partida hacia un futuro más promisorio. El camino del socialismo con peculiaridades chinas que abre el PCCh ha ensanchado la vía por la que los países en desarrollo avanzan hacia la modernización, ha ofrecido una flamante alternativa a los países y naciones del mundo que deseen tanto acelerar su desarrollo como mantener su propia independencia, y ha contribuido con sabiduría china y propuestas chinas a la solución de los problemas de la humanidad. De cara al futuro, pese a las vicisitudes internacionales, bajo el liderazgo del PCCh, China será siempre constructor de la paz mundial, contribuidor al desarrollo global y defensor del orden internacional y hará mayores aportes al bienestar de toda la humanidad y la comunidad de futuro compartido de la humanidad.
(Web editor: 周雨, Zhao Jian)