Eludir las conversaciones sobre Fort Detrick expone el doble rasero de EE.UU sobre el rastreo del origen de COVID-19

Pueblo en Línea  2021:08:16.12:22

(Dibujos animados de Lu Lingxing)

Después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmara que es "extremadamente improbable" que el nuevo coronavirus se filtrara de un laboratorio en China, ciertos países, incluido Estados Unidos, han permanecido indiferentes al hecho de que el mundo se encuentra en una etapa crítica de la lucha contra la pandemia de COVID-19, habiendo promocionado una vez más la teoría de la "fuga de laboratorio", politizando el virus en un intento de estigmatizar a China.

China siempre ha adoptado una actitud abierta, transparente, científica y cooperativa en la cuestión del rastreo del origen. Ha tomado la iniciativa en la cooperación con la OMS en el rastreo del origen y ha invitado dos veces a expertos de la OMS para estudios de rastreo del origen. Además, China ha abierto el Instituto de Virología de Wuhan a expertos internacionales. Estados Unidos, por el contrario, nunca ha dado explicaciones a la comunidad internacional sobre cuestiones como cuándo surgió la enfermedad por primera vez en Estados Unidos y cómo se transmitió, así como sobre cuestiones relacionadas con el laboratorio biológico de Fort Detrick.

¿Por qué Estados Unidos se negó a revelar las razones detrás del cierre de Fort Detrick, un laboratorio de nivel 4 de bioseguridad dirigido por el Ejército que estudia biomateriales mortales e infecciosos? ¿Por qué Estados Unidos se negó a aceptar investigaciones internacionales? Estados Unidos tiene más de 200 laboratorios biológicos relacionados con el Ejército en 25 países y regiones, incluidos Ucrania y Afganistán. Desde 2003, ha habido cientos de casos en los que los trabajadores de algunos de los laboratorios que realizan la investigación se infectaron con bacterias debido al contacto accidental con los microorganismos mortales, y las enfermedades luego se convirtieron en epidemias en las comunidades locales. ¿Qué pasó en estos laboratorios?

Haciendo la vista gorda ante su propio fracaso durante la respuesta al COVID del país, Estados Unidos no ha escatimado esfuerzos en denigrar a China. Este doble rasero ha socavado gravemente los estudios científicos mundiales sobre el virus, ha obstaculizado los esfuerzos conjuntos del mundo en la lucha contra el virus y ha agravado las confrontaciones y divisiones políticas. EE.UU ha vivido una situación de COVID-19 más grave que en otros países del mundo, por lo que debe asumir la responsabilidad de su propia gente y la gente de todo el mundo, y desempeñar un papel activo en la batalla global contra el COVID-19.