Grandes esperanzas globales para un futuro verde

Pueblo en Línea  2021:09:22.13:49

Trabajadores inspeccionan los paneles de energía solar instalados en un estanque de Hai'an, provincia de Jiangsu. (Foto: Zhai Huiyong/ China Daily)

Por Chen Weihua

Frans Timmermans estaba encantado cuando se enteró de que China había comenzado con su mercado nacional de comercio de emisiones de carbono para combatir el cambio climático.

El vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea para el Pacto Verde Europeo también se enorgulleció de que el Régimen de Comercio de Derechos de Emisión de la Unión Europea (ETS), esté inspirando a otros países y regiones a desarrollar sistemas similares para hacer que sus economías sean menos dependientes del carbono. El ETS europeo se estableció en 2005 como el primer sistema de su tipo en el mundo.

Timmermans destacó que el ETS, que opera en todos los estados miembros de la UE y en Islandia, Liechtenstein y Noruega, ya cubre alrededor del 40 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero de la Unión Europea. Su implementación ha sido muy exitosa.

"Vi que este verano China también presentó su sistema de comercio de emisiones, y realmente quiero saludar ese paso", afirmó.

Timmermans considera que los intercambios bilaterales y la cooperación sobre el clima ayudaron a China a decidirse a establecer su mercado nacional de comercio de emisiones de carbono para combatir el cambio climático.

La Unión Europea compartió su experiencia técnica cuando China en varias ciudades puso a prueba los planes de comercio de derechos de emisión para allanar el camino a su sistema nacional.

El mercado nacional de carbono de China, lanzado el 16 de julio de este año, incluye más de 2.000 empresas del sector de generación de energía y cubre más de 4.500 millones de toneladas métricas anuales de dióxido de carbono. Al entrar en vigor, desplazó al RCDE de la Unión Europea como el mecanismo de este tipo más grande del mundo.

"Esta es una forma de continuar nuestra cooperación en medidas concretas y pasos concretos hacia adelante", recalcó Timmermans, quien fue nombrado el 15 de septiembre por la revista Times como una de las 100 personalidades más influyentes del 2021.

Timmermans, quien se desempeñó entre el 2012 y el 2014 como ministro de Asuntos Exteriores de Holanda, también ha sido el número 2 de la Comisión Europea desde 2014, trabajando como vicepresidente primero de Jean-Claude Juncker.

Timmermans señaló que China históricamente ha desempeñado un papel crucial para lograr que el mundo se comprometa a mantener el aumento de las temperaturas globales por debajo de los 2 grados celcius.

"No tendríamos un Acuerdo de París sin que China desempeñe un papel muy activo para llegar a una conclusión", aseguró Timmermans, quien también es comisario europeo de Acción Climática.

El Acuerdo de París, alcanzado en 2015, tiene como objetivo limitar en este siglo el aumento de la temperatura global a 2 grados celcius desde los niveles preindustriales, al tiempo que continúa los esfuerzos para frenarlo aún más hasta los 1,5 grados celcius.

Timmermans está convencido de que hay un profundo entendimiento en China de que el país necesita continuar desempeñando un papel histórico para que el mundo pueda llegar a un acuerdo ante el desafío climático.

Este viernes se publicó un informe de Naciones Unidas donde se subraya que para la temperatura promedio mundial aumentará para fin de siglo en 2,7 2 grados celcius, incluso si todos los países cumplen con los recortes de emisiones prometidos. El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, advirtió que “el mundo está en un camino catastrófico".

Timmermans enfatizó la necesidad de un fuerte compromiso de todos los principales emisores para hacer que la XXVI Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, o COP26, en Glasgow, Escocia, sea un éxito. La conferencia está programada para celebrarse del 1º al 12 de noviembre.

Timmermans también destacó que los discursos del presidente Xi Jinping y la reciente llamada telefónica de Xi con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, abrigan esperanzas de que China contribuya al éxito en Glasgow.

Xi prometió en la 75ª sesión de la Asamblea General de la ONU, efectuada en septiembre del pasado año, que China buscará alcanzar su punto máximo de emisiones de carbono antes del 2030 y lograr la neutralidad de carbono antes del 2060.

El 10 de septiembre, durante una conversación telefónica con Biden, el presidente Xi manifestó que China y Estados Unidos, basados en el respeto de las preocupaciones centrales del otro y la gestión adecuada de las diferencias, deberían avanzar en la cooperación sobre el cambio climático y otros temas.

Si bien China es el mayor emisor de gases de efecto invernadero, con alrededor del 27 por ciento del total mundial, su cifra de emisiones per cápita es ligeramente superior al promedio de los 27 estados miembros de la Unión Europea y apenas supera la mitad de Estados Unidos, el mayor emisor histórico de carbono.

Timmermans indicó que las naciones, especialmente los países que son grandes potencias, actuarán si lo consideran de su interés, y no solo para complacer a los demás. Ese también es el caso de China.

La Unión Europea ha ofrecido un buen ejemplo para demostrar a los países que llegaron tarde al mundo industrializado que hay una manera de crecer económicamente sin dejar de reducir las emisiones, y agregó que, en los últimos 20 años la Unión Europea redujo sus emisiones en un 24 por ciento mientras crecía su economía en más del 60 por ciento.

Timmermans piensa que la Unión Europea y China pueden trabajar juntas, especialmente en la transición energética, un área en la que China avanza con fuerza.

China es el mayor inversor y productor mundial de energía renovable, desde la eólica hasta la solar y la hidroeléctrica, así como de automóviles eléctricos. La nación sigue siendo el mayor consumidor mundial de carbón, aunque su uso sigue disminuyendo en la matriz energética.

Xie Zhenhua, enviado especial de China para asuntos del cambio climático, recalcó en una reunión a principios de este mes que la proporción de carbón en el consumo de energía primaria de China cayó del 72 por ciento en 2005 al 56,8 por ciento el año pasado. La proporción de energía no fósil en su consumo de energía primaria alcanzó el 15,9 por ciento, frente al 7,4 por ciento en el quinquenio anterior.

Xie describió el plan de China para lograr la neutralidad de carbono desde su pico de emisiones en solo 30 años como el más corto del mundo, en comparación con los 70 años de la Unión Europea y los 45 años de Estados Unidos.

Timmermans dijo que la UE y China pueden trabajar juntas en muchos campos, desde la energía renovable hasta los automóviles eléctricos, no solo para ellos mismos, sino también para ayudar al mundo en desarrollo a dar un salto y llevar la energía no basada en carbono a su gente.

"Veo muchas áreas en las que la Unión Europea y China pueden desarrollar su relación para que esta transición avance sin problemas. Lo podemos hacer en beneficio de nuestros pueblos y sin dejar a nadie atrás", aseveró.

“Los países no pueden darse el lujo de rechazar los nuevos desarrollos tecnológicos”, apuntó Timmermans.

"Necesitamos compartirlos lo antes posible", y agregó que esto debe hacerse en igualdad de condiciones donde las inversiones estén protegidas.

Timmermans recordó que el uso del carbón debe detenerse lo antes posible. En cambio, el futuro de la industria del acero radica en el acero verde, donde el calor necesario para hacer la aleación no provenga del carbón, sino del hidrógeno producido a partir de la energía solar y eólica.

"Creo que esta es una oportunidad increíble para la Unión Europea, y especialmente una oportunidad increíble para China", aseguró Timmermans, refiriéndose claramente a la enorme capacidad de acero que tiene China, producción que representa más de la mitad del total mundial.

Frans Timmermans, vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea para el Pacto Verde Europeo, interviene en una conferencia en Bruselas, 14 de julio del 2021. (Foto: Zhang Cheng/ Xinhua)

Estar de acuerdo

Timmermans aseguró que los contactos bilaterales sobre el clima entre la Unión Europea y China desde el 2018 se han intensificado.

"Tenemos muchos, muchos intercambios. Quiero mencionar particularmente las varias discusiones que ya he tenido con el viceprimer ministro Han Zheng. Estamos en la misma página", dijo.

Timmermans y Han inauguraron el 1º de febrero el primer Diálogo de Alto Nivel sobre Medio Ambiente y Clima entre China y la Unión Europea. Este mecanismo se acordó en una cumbre virtual celebrada el 14 de septiembre del año pasado durante la presidencia alemana del Consejo de la Unión Europea a la que asistieron el presidente Xi, la canciller alemana Angela Merkel, el presidente del Consejo Europeo Charles Michel y la presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen.

Timmermans y Han se conocieron en julio del año pasado a través de un enlace de video.

Después del diálogo de alto nivel en febrero con Han, Timmermans tuiteó: "Hemos sentado las bases para una buena asociación y trabajaremos en estrecha colaboración hacia la COP26 en Glasgow y la COP15 en Kunming. Debemos aprovechar estos momentos para poner al mundo en un camino de recuperación verde, para garantizar la salud y el bienestar de todos para las generaciones venideras".

Dirigiéndose a Xie, el enviado climático de China que fue el principal negociador de la nación en este campo durante muchos años, Timmermans aseguró: "No nos conocemos desde hace mucho tiempo, pero confiamos el uno en el otro".

Timmermans recalcó que Xie es muy claro sobre el compromiso continuo de China de descarbonizar su economía y lograr la neutralidad de carbono.

Timmermans valora de muy positiva la relación con sus colegas chinos, y no porque ellos estén de acuerdo con todo. Incluso esos desacuerdos "conducen a un diálogo" y no "estropean nuestra cooperación positiva en los puntos donde hay consenso".

"Creo que esto es una señal de una relación sana y madura de que no solo hablas de las cosas en las que estás de acuerdo, sino que también abordas abierta y directamente los problemas en los que no estás de acuerdo", afirma este hombre de 60 años, que ha pasado la mayor parte de su vida lejos de los Países Bajos y habla con fluidez inglés, francés, alemán, italiano y ruso, demás de su holandés nativo.

Un ejemplo es que no siempre hay acuerdo sobre el tema del carbón, pero se discute porque el mundo necesita avanzar en la reducción de la producción de energía a base de carbón.

"Hacemos esto de una manera constructiva, incluso cuando no estamos de acuerdo. Eso es lo que me gusta de la relación", agrega.

Timmermans subrayó que el compromiso continuo de China para descarbonizar su economía y lograr la neutralidad de carbono es muy claro en sus reuniones, y espera con interés nuevos anuncios sobre los planes de la nación.

Ding Chun, director del Centro de Estudios Europeos de la Universidad de Fudan en Shanghai, detalló que Timmermans ha sido muy activo y pragmático en la promoción de la cooperación con China.

Kunming a Glasgow

Timmermans expresó su agradecimiento a China como sede de la 15ª reunión de la Conferencia de las Partes en el Convenio sobre la Diversidad Biológica (COP15) a celebrarse en Kunming, capital de la provincia de Yunnan. Debido a la pandemia de COVID-19, la conferencia se llevará a cabo en línea del 11 al 15 de octubre de este año, y de forma presencial del 25 de abril al 8 de mayo del año entrante.

Haciéndose eco de los comentarios del presidente Xi a lo largo de los años de que "las montañas verdes y el agua clara son iguales a montañas de oro", Timmermans elogió a China por comprender que la amenaza de la pérdida de la biodiversidad es tanto un desafío ambiental como una crisis climática.

"Esa es la premisa sobre la que se está preparando Kunming. Creo que eso es muy sabio", indicó Timmermans, quien asistió a un foro mundial de biodiversidad este mes en Marsella, Francia, donde el primer ministro chino, Li Keqiang, intervino en vídeo grabado.

Timmermans cree que dividir la COP15 en dos partes puede ayudar a mjorar la reunión del próximo año.

"Tenemos que llegar a un acuerdo internacional de que dejaremos que la naturaleza se restaure a sí misma. Necesitamos proteger partes sustanciales del planeta", recordó.

"Espero que podamos llegar a algunas conclusiones en Kunming, y sé que puedo contar con el fuerte compromiso de las autoridades chinas".

China es el tercer país con mayor biodiversidad del mundo, con más de 34.000 especies conocidas de animales y plantas.

Timmermans también tiene grandes esperanzas en la COP26 de Glasgow.

"Quiero que podamos decir después que todavía estamos en camino de mantener el aumento de la temperatura muy por debajo de los 2 grados y que todavía tenemos una oportunidad de 1,5 grados. Esa debería ser la conclusión colectiva al final de la COP26", dijo, y agregó: "Todos nos enfrentamos a una gran responsabilidad hacia las próximas generaciones".

Aunque la pandemia plantea un grave desafío, Timmermans considera que también ha ayudado a los europeos a unirse no solo en la vacunación, sino en liberar una cantidad de dinero sin precedentes para la inversión para transformar la economía de la Unión Europea en un modelo más sostenible.

"Estamos invirtiendo en el futuro de nuestros hijos y nietos", enfatizó.

La Unión Europea ha prometido llegar a la neutralidad climática para el 2050. Un tercio de su inversión de 1,8 billones de euros (2,1 billones de dólares) de su Plan de Recuperación NextGenerationEU y su presupuesto de siete años financiará el Pacto Verde Europeo.

Un informe de abril de la Comisión Europea demostró que el 93 por ciento de los ciudadanos de la Unión Europea ven el cambio climático como un problema grave. El informe citó el Eurobarómetro, una serie de encuestas iniciadas por la Comisión Europea para medir la opinión pública en los estados miembros.

De cara a la COP26, Timmermans es optimista. "Podemos enfrentar el desafío", asegura. "Lo único que puede impedirnos enfrentarlo es que peleemos entre nosotros y no lleguemos a conclusiones comunes sobre lo que la humanidad necesita”.

"Ninguna nación en la Tierra puede escapar de esta responsabilidad y no tenemos tiempo que perder".

Timmermans pidió a los países ricos que cumplan con su obligación sobre el financiamiento climático para las naciones pobres.

En la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en Copenhague, Dinamarca, en 2009, los países ricos prometieron proporcionar 100 mil millones de dólares al año para el 2020 en adaptación y mitigación del clima a favor de las naciones más pobres.

El último informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos demuestra que los países ricos movilizaron casi 80 mil millones de dólares en financiamiento climático en 2019, pero gran parte de ellos fue en forma de préstamos, algunos de ellos con términos comerciales y no en forma de subvenciones.

El informe evidencia que Estados Unidos tenía el mayor déficit entre 23 países, cumpliendo solo el 4 por ciento de su promesa de 43 mil millones de dólares.

En su discurso del 15 de septiembre sobre el Estado de la Unión, von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, insistió en que la Unión Europea ha cumplido su compromiso al contribuir con 25 mil millones de dólares anuales. También propuso 4.000 millones de euros adicionales para la financiación del clima hasta el 2027.

"Pero esperamos que Estados Unidos y nuestros socios también den un paso al frente", fustigó von der Leyen.

En este sentido, Timmermans opina que además de las reducciones de emisiones de todos los principales emisores, los países ricos deben cumplir con la promesa de 100 mil millones de dólares para la adaptación y mitigación del clima. De lo contrario, los países más pobres, algunos de los cuales corren el riesgo de desaparecer debido al cambio climático, perderán la confianza en el sistema y en las naciones poderosas.

"Necesitamos fortalecer la confianza de los países menos desarrollados, de los estados insulares, en que el sistema los protegerá y les proporcionará los medios para adaptarse al cambio climático", agregó.

"Eso es algo que tenemos que lograr en Glasgow", adelantó Timmermans.