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Un Washington responsable es necesario para lazos sanos China-EEUU

Xinhua  2021:11:17.08:28

BEIJING, 16 nov (Xinhua) -- Ante una mirada global seria, el presidente de China, Xi Jinping, y su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, acordaron hoy en una productiva reunión virtual reencauzar la relación bilateral posiblemente más importante del mundo.

El alentador consenso, junto con otros resultados positivos de la primera reunión entre los dos jefes de Estado desde que Biden asumió el cargo en enero, ha inyectado una urgente y necesaria dosis de optimismo a los lazos China-EEUU y también al mundo en dificultades.

Puesto que el mundo ha entrado en un período de nueva turbulencia y transformación, y tanto China como Estados Unidos han alcanzado una etapa crítica de desarrollo, la construcción de una relación sana y firme entre las dos mayores economías del mundo es particularmente crucial.

Como lo comentó Xi en una conversación telefónica con Biden en septiembre, si China y Estados Unidos serán capaces de manejar bien su relación "es la pregunta del siglo para la cual los dos países deben proporcionar una buena respuesta".

La respuesta de China ha sido clara y consistente. Busca fomentar una relación sana y estable con Estados Unidos caracterizada por el respeto mutuo, la coexistencia pacífica y la cooperación de ganar-ganar, y ha avanzado responsablemente hacia este objetivo.

Ya es hora de que Estados Unidos empiece a actuar de forma realmente responsable y de que se una a China para construir sobre un arduamente ganado impulso y para hacer avanzar sus relaciones para beneficio de ambas naciones y del mundo en general.

Un Washington responsable debe defender el respeto mutuo con China con todo su corazón.

El respeto mutuo es el cimiento del edificio de las relaciones China-EEUU. Esto significa que los dos países deben tratarse como iguales y respetar los sistemas sociales y caminos de desarrollo, intereses esenciales y principales preocupaciones respectivos, así como el derecho al desarrollo.

Así, Washington tiene que dejar de lanzar barro al sistema, camino e instituciones de China, los cuales han sido elegidos por el pueblo chino de acuerdo con las condiciones únicas de China y han conducido al mayor país en desarrollo y el más poblado del mundo a los dos milagros del rápido crecimiento económico y la estabilidad social duradera.

Lo que es particularmente imperativo en este momento es que Estados Unidos debe respetar el principio de una sola China, cumplir su promesa de no apoyar "la independencia de Taiwan" y dejar de jugar con fuego con la cuestión de Taiwan, el asunto más importante y más delicado de las relaciones China-Estados Unidos. Ninguna provocación o amenaza harán que China ceda ni un centímetro.

También está muy lejos del respeto mutuo que una parte sencillamente invente por su cuenta o por medio de una camarilla algunas llamadas "reglas del juego" y luego las imponga a la otra parte. El respeto mutuo implica consultas auténticas.

Un Washington responsable debe buscar la coexistencia pacífica con China de buena fe.

El no conflicto y la no confrontación deben ser la cuestión fundamental que ambas partes tienen que sostener, y los dos países deben adoptar un enfoque constructivo para gestionar sus diferencias y los asuntos delicados, las cuales naturalmente existen, pero no debe permitirse que se propaguen o que incluso socaven la relación en general.

En retrospectiva, el acontecimiento más importante de las relaciones internacionales de los últimos 50 años es la reapertura y desarrollo de las relaciones China-EEUU, lo cual ha generado enormes beneficios para ambos países y para el resto del mundo.

Mirando hacia delante, Washington debe trabajar con China para incrementar la comunicación, aprender de los altibajos de la trayectoria histórica de sus lazos, y trazar el rumbo correcto para el futuro desarrollo de su consiguiente relación.

Dado su comportamiento de los últimos años, Washington tiene que emprender acciones concretas para demostrar que su llamado para el adecuado manejo de los lazos EEUU-China y la proclamación de que no buscará la contención de China son una elección estratégica, y no una estratagema táctica.

Un Washington responsable también debe perseguir la cooperación de ganar-ganar con China de manera seria.

Considerando sus economías gigantes y sus fortalezas complementarias, sería un lamentable desperdicio de grandes oportunidades y de recursos que China y Estados Unidos únicamente buscaran coexistir en paz.

Por otra parte, el mundo ha sido testigo en los últimos 50 años de que si cooperan, los dos países pueden hacer mucho para impulsar el desarrollo de ambos, mejorar el bienestar de sus pueblos y hacer del mundo un lugar mejor.

Como lo señaló Xi en la reunión de hoy, la cooperación China-EEUU puede no solucionar todos los problemas, pero son pocos los problemas que podrán resolverse sin la cooperación China-Estados Unidos. La respuesta a la pandemia, el cambio climático y muchos otros desafíos comunes exigen sus esfuerzos conjuntos.

Sin duda, existe la competencia entre China y Estados Unidos. Sin embargo, es inútil e irresponsable utilizar el ominoso concepto de "competencia estratégica" para definir una relación tan importante y con tanto potencial positivo para todo el mundo.

Como lo señaló Xi claramente, China y Estados Unidos son dos buques gigantes que navegan en el océano, que deben romper olas y seguir adelante juntos sin perder el rumbo ni la velocidad, y mucho menos chocar.

Para que esto ocurra, Estados Unidos debe unirse a China para actuar responsablemente. El momento para empezar es ahora.

(Web editor: 吴思萱, Zhao Jian)

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