BUENOS AIRES, 10 dic (Xinhua) -- Economistas e investigadores argentinos ponderaron este viernes los lineamientos económicos derivados de la última reunión del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) en el que se abordó el trabajo económico para el año 2022 y temas como la lucha contra la corrupción.
El economista argentino Gustavo Neffa destacó en esta oportunidad como puntos sobresalientes del encuentro, llevado a cabo el pasado lunes, el foco que actualmente coloca China para mejorar la distribución del ingreso y el propósito de la dirigencia de mantener la estabilidad macroeconómica y de llevar adelante una política fiscal y monetaria sostenible y flexible.
"China entró en una etapa donde el crecimiento económico ya no es su única prioridad sino la redistribución del ingreso para elevar el nivel de vida y la satisfacción de su población; en materia de política económica se evidencia a una China que coloca entre sus objetivos el de crecer de manera más equitativa", sostuvo el director de la firma de análisis financiero Research for Traders.
En la reunión, en la que además se orientó el trabajo relacionado con la conducta del PCCh, se pidieron políticas fiscales proactivas eficaces centradas en la sostenibilidad así como políticas monetarias "flexibles y moderadas" junto con una estrategia de expansión de la demanda interna y la promoción de la restauración sostenida del consumo.
"Las conclusiones de esta reunión del Partido Comunista Chino remarcan una política monetaria flexible y China tiene modos de lograr esto, las reservas del Banco Popular de China lo permiten", precisó.
La idea de expandir la demanda, expuso el analista, refleja el foco que está teniendo la dirigencia china, a través del XIV Plan Quinquenal, de un continuo combate a la pobreza y a las desigualdades.
"Se apunta a mejorar la distribución, sobre todo después de un año duro a nivel global y también para China, por eso también hoy vemos las regulaciones a las grandes empresas tecnológicas y al sector farmacéutico, es decir, se busca un poco más de disponibilidad de bienes para la población", indicó.
"Con este tipo de líneas se busca fomentar el consumo, bajar los precios, hacer masivos los bienes y reducir la pobreza en definitiva; también vemos que todo lo que es consumo y turismo está dentro de la agenda del Partido Comunista de China para elevar los niveles de satisfacción", añadió.
El economista subrayó los actuales indicadores económicos del país asiático como una buena base para poder apuntar hacia una política monetaria flexible.
Por su parte, el investigador argentino, Lucas Gualda, resaltó la política china de "circulación dual" como una estrategia acertada para la rápida reactivación económica en medio de la prolongación de la pandemia del coronavirus (COVID-19).
"Hablamos de un país con un mercado inmenso, que está desarrollando la resiliencia necesaria para afrontar los desafíos del contexto. Es esa línea además China ha comenzado a cambiar su matriz energética, proceso que se da con algunas dificultades, pero que han sabido superar", indicó.
El también asesor en el Senado argentino y becario de la Universidad de Estudios Internacionales de Shanghai, valoró el objetivo prioritario del PCCh de trabajar para que la población acceda a viviendas asequibles y de calidad.
"El ritmo de crecimiento que ha vivido el país desde la reforma y la apertura hizo difícil fiscalizar la calidad de ese desarrollo. Lo que viene el Partido Comunista Chino a zanjar en este nuevo plan quinquenal es dejar de velar por el crecimiento exclusivamente, sino que este se dé de manera natural y sustentable", concluyó Gualda.
(Web editor: Zhao Jian, 周雨)