DACCA, 21 abr (Xinhua) -- El exasesor de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el Sudeste Asiático, Muzaherul Huq, opina que "China está en la dirección correcta con su actual política y acción para contener la infección del coronavirus".
La detección y la gestión tempranas con el aislamiento de los contagios son cruciales, dijo el profesor en una entrevista con Xinhua.
Señaló que cortar la fuente y el contagio con el tratamiento temprano a las personas infectadas es más eficaz, mientras varias partes de China están luchando contra un resurgimiento de la COVID-19, atribuible a la variante ómicron.
Frente a esta grave situación, las autoridades chinas concluyeron que es el momento para que el país más poblado del mundo se adhiera a su política dinámica de cero contagio de la COVID-19.
Refiriéndose a los esfuerzos de Shanghai para controlar las fuentes de infección, cortar las rutas de transmisión y proteger a los vulnerables, declaró que esta estrategia ha demostrado ser eficaz en las batallas contra la variante ómicron, prestando atención a la población vulnerable y a los pacientes de edad avanzada con otras enfermedades o comorbilidad.
El uso de máscaras, la desinfección y evitar lugares abarrotados para mantener la distancia son medidas adicionales para evitar el contagio, recordó.
Aunque la situación actual es alarmante, las estrictas medidas que China está adoptando pueden considerarse el enfoque correcto para contener la propagación del virus, acotó el exasesor de la OMS.
Ahondó en que China tiene experiencia en contener con éxito el coronavirus, incluyendo la variante ómicron, que se propaga más rápido e infecta a más personas en un corto lapso.
"Sobre la base de la experiencia, China está tomando medidas adecuadas para sus ciudades densamente pobladas y sus alrededores", señaló.
Como la sociedad china está estrictamente organizada, la gente apoya las medidas del Gobierno para prevenir la propagación del virus, así como para contener la pandemia, reseñó el también exdirector del Centro de Educación Médica en Bangladesh.
Sostuvo que la detección y la gestión tempranas son muy posibles en el sistema de salud chino con el apoyo del público.
El sistema de salud chino cubre "a todas las personas, en particular a las más vulnerables, así como a los ancianos y pacientes comórbidos", detalló.
Además, concedió, la vacunación es otra gran arma contra la enfermedad infecciosa y China tiene una amplia cobertura de vacunación con sus propios productos.
Huq expresó la esperanza de que la actual ola de COVID-19 no tenga efectos adversos en la economía y la vida social de China.
"Pero es necesario contenerlo eficazmente en el menor plazo posible. Lo que el Gobierno chino debe tomar seriamente en cuenta es el rastreo adecuado de contactos y la gestión temprana. Las personas también deben involucrarse y seguir estrictamente las medidas de salud para protegerse del contagio del virus", planteó el profesor.
En su entender, el Gobierno chino, "con su experiencia, pronto contendrá el contagio y (el pueblo chino) estará a salvo del virus".
(Web editor: 吴思萱, Zhao Jian)
