El personal de China Southern distribuye kits de prevención de la pandemia de edición limitada a los pasajeros de algunos vuelos internacionales a China. (Foto: Cortesía de China Southern)
Por Cui Fandi
China ha ajustado su requisito previo a la salida para los viajeros extranjeros, debido a que los anuncios de múltiples embajadas chinas, incluida la Embajada de China en Estados Unidos, muestran que se han eliminado algunas pruebas previas a la salida requeridas anteriormente, incluidas las pruebas de ácido nucleico una o dos semanas antes del embarque, el monitoreo obligatorio de la salud y las pruebas de anticuerpos IgM.
El cambio de política tiene en cuenta las características de la última cepa mutante prevalente de Ómicron, y es poco probable que represente un riesgo para la lucha nacional contra el COVID-19 en China, afirmaron expertos al Global Times.
Bajo los nuevos reajustes, las personas que viajen a China solo deberán completar dos pruebas de ácido nucleico dentro de las 48 horas antes del embarque y una prueba de antígenos dentro de las 12 horas antes del embarque. Aquellos que den negativo en la prueba recibirán un código de salud y se les permitirá abordar el avión. No habrá requisitos adicionales para aquellos que se han recuperado de infecciones.
Además de la Embajada de China en Estados Unidos, las Embajadas de China en Emiratos Árabes Unidos, Países Bajos, Irlanda, Dinamarca, Serbia y Ruanda han emitido ajustes similares a los requisitos para viajar a China desde esos países.
En particular, la embajada china en Emiratos Árabes Unidos eliminó el requisito de dos pruebas de ácido nucleico 21 y 14 días antes del viaje y el requisito de pruebas de TC para pacientes recuperados, y la embajada en Serbia eliminó el requisito de una solicitud de código de salud para aquellos que han sido vacunados durante menos de 14 días.
Tales ajustes tienen en cuenta en gran medida las características de transmisión de la cepa variante Ómicron y el aumento de las tasas de vacunación, precisaron expertos en inmunología al Global Times.
El período de incubación para las infecciones causadas por Ómicron es corto, y el período de incubación para las últimas variantes de Ómicron es de dos o tres días, precisó el inmunólogo Zhuang Shilihe, lo que significa que los resultados de las pruebas dentro de las 48 horas antes de la salida son suficientes en comparación con las pruebas de ácido nucleico de siete o 14 días previos a la fecha de salida.
"También ha llegado a una etapa en la que la tasa de vacunación de los ciudadanos chinos en el extranjero, especialmente los estudiantes, ya es alta, lo que es la base para reducir la frecuencia de las pruebas y la duración de la cuarentena", recalcó Zhuang.
Al apegarse a la política dinámica de COVID cero, que los epidemiólogos creen que se adapta mejor a China, el gobierno ha ajustado varias veces el manual de estrategias contra el COVID-19.
Beijing ya anunció la implementación oficial de la política de cuarentena, acortada a principios de mayo.
El acortamiento del tiempo de cuarentena se hizo basándose en el hecho de que el período de incubación de la variante Ómicron es más corto que el de las variantes perversas, declaró bajo condición de anonimato un experto del Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) al Global Times. Y señaló que también se reajusta para aliviar la presión de la cuarentena sobre los recursos médicos y de las instalaciones, y que el resultado de esta política proporcionará referencia para una mayor flexibilización de las medidas contra el COVID-19.
“Teniendo en cuenta el corto período de incubación y los síntomas leves de Ómicron, no se espera que las pruebas ajustadas previas a la entrada y el aislamiento posterior a la entrada tengan un impacto significativo en la situación de prevención de epidemias domésticas en China”, concluyó Zhuang.
(Web editor: Rosa Liu, Zhao Jian)
