Por Ma Si
El déficit en la financiación del plan del gobierno de Estados Unidos para reemplazar los equipos de telecomunicaciones chinos subraya una vez más que cualquier intento de promover el desacoplamiento tecnológico también dañaría los intereses de Estados Unidos, afirmaron expertos.
Noticias recientes indican que la Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos precisó que eliminar los equipos de telecomunicaciones chinos de las redes de telecomunicaciones existentes costaría 5.3 mil millones de dólares, mucho más dinero de lo que el Congreso de Estados Unidos había reservado.
Xiang Ligang, director general de information Consumption Alliance, una asociación de la industria de las telecomunicaciones de China, aseguro que es probable que el inadecuado financiamiento plantee desafíos de conectividad a las personas en áreas remotas de Estados Unidos.
“Los productos de Huawei Technologies Co y ZTE Corp son utilizados por los operadores de telecomunicaciones estadounidenses para ofrecer servicios de red y banda ancha en algunas de las regiones más remotas de Estados Unidos”, recordó Xiang.
Xiang también considera que el gobierno de Estados Unidos está desperdiciando mucho dinero en reemplazar los equipos de telecomunicaciones chinos, y los consumidores en estas áreas sufrirán por la falta de servicios de telecomunicaciones de buena calidad.
La Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos ya ha prohibido a los operadores de telecomunicaciones estadounidenses usar mediante subsidios federales los equipos de telecomunicaciones de Huawei y ZTE, alegando preocupaciones de seguridad nacional. Las dos compañías chinas han negado repetidamente las acusaciones, definiéndolas como infundadas.
En diciembre del 2020, la Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos anunció reglas que requieren que los operadores que usan equipos ZTE o Huawei "retirar y reemplazar" ese equipo. Este plan es un gran desafío para las empresas rurales que no cuentan con suficiente presupuesto ni trabajadores para cumplir la orden.
Huawei dijo el año pasado que "la ordenanza de la Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos solo crea extraordinarios desafíos para que los operadores en las áreas más remotas de Estados Unidos que aspiren a mantener el mismo alto nivel y calidad de servicio que hoy brindan sin interrupciones".
Steve Berry, presidente y CEO de la Competitive Carriers Association, un grupo comercial integrado por unos 100 proveedores de servicios inalámbricos de Estados Unidos, a principios de este año emitió una declaración pidiendo al gobierno de Estados Unidos que garantice que ese programa de “retiro y reemplazo” esté totalmente financiado para que la conectividad se mantenga durante la transición y entrada de los nuevos equipos en las redes.
En este sentido, Bai Ming, subdirector de investigación de mercado internacional de la Academia China de Comercio Internacional y Cooperación Económica, resaltó que cualquier intento de promover el desacoplamiento tecnológico también dañará los intereses de Estados Unidos, como ha quedado demostrado con numerosos casos del pasado reciente.
(Web editor: Zhao Jian, 周雨)
