Renminbi. (Foto: IC)
En medio del empeoramiento de la turbulencia financiera mundial, a medida que las principales monedas mundiales, en particular el euro, se han debilitado bruscamente frente al dólar estadounidense, el yuan chino se ha mantenido estable y los activos chinos se han vuelto cada vez más atractivos para los inversores globales. Esta ventaja subraya los sólidos fundamentos económicos de China, afirmaron los economistas.
La tasa de paridad central del yuan chino se fortaleció este jueves 17 puntos básicos hasta los 6.7265 frente al dólar estadounidense, con su rango de fluctuación cada vez más estrecho desde mediados de mayo, informó el Sistema de Comercio de Divisas de China.
Esa tendencia estabilizadora del yuan se produce cuando el índice del dólar estadounidense (DXY) sigue alcanzando máximos de casi dos décadas. La lectura alcanzó un máximo de 109.29 en las operaciones intradía, aumentando más del 13 por ciento en lo que va del año.
En correspondencia con la fuerte apreciación del dólar estadounidense, las principales monedas, incluidos el euro, la libra esterlina y el yen japonés, han visto caer sus valores entre un 11 y un 16 por ciento. El euro incluso se desplomó este miércoles por debajo de la paridad frente al dólar, por primera vez en 20 años.
En comparación, el yuan ha mostrado una fuerte resistencia en medio del turbulento mercado de divisas, depreciándose en lo que va del año solo alrededor de un 5,4 por ciento frente al dólar. A partir de mediados de abril, la tasa del yuan frente al dólar se debilitó bruscamente de 6.3896 a 6.7871. Desde entonces, el cambio ha fluctuado alrededor de 6.7, con un rango cada vez más estrecho.
“La presión sobre el yuan se ha aliviado efectivamente después de una ronda de depreciación”, confirmó Guan Tao, economista jefe global de BOC International y ex funcionario de la Administración Estatal de Divisas.
“Con los brotes de Ómicron en China controlados desde mayo, las políticas gubernamentales para estabilizar el crecimiento se han implementado y han comenzado a surtir efecto”, aseguró Guan, señalando que tanto los indicadores económicos como los financieros han mejorado.
"En particular, la rápida recuperación de las exportaciones del país en mayo y junio, con un superávit comercial en expansión, ha formado un apoyo fundamental para la estabilización del yuan", agregó.
“El mecanismo de tipo de cambio del yuan, que lo ancla a una canasta de monedas, ayuda a mantenerlo fluctuando en un rango relativamente estable”, apuntó Zhou Yu, investigador de la Academia de Ciencias Sociales de Shanghai.
En medio de la creciente inflación en Estados Unidos, los observadores del mercado creen que el dólar se mantendrá fuerte durante el resto del año y seguirá acumulando presión sobre otras monedas. El IPC de Estados Unidos subió en junio a un máximo de 41 años en 9.1 por ciento.
Aunque Estados Unidos está sumido en problemas económicos, Europa tiene fundamentos económicos aún peores, con crecientes riesgos de estanflación, señalaron los analistas. La crisis de Ucrania, avivada por la OTAN que lidera Estados Unidos, ha provocado una grave escasez de energía para muchos países europeos y ha disminuido gravemente sus perspectivas económicas.
Las principales economías de la eurozona, incluidas Alemania y Francia, han experimentado un deterioro de la evolución. Alemania registró un déficit comercial en mayo, la primera vez en más de 30 años.
“Mientras que otras economías importantes luchan con la creciente inflación, lo que ha llevado a políticas monetarias más estrictas y riesgos de recesión, la inflación de China se ha mantenido en un nivel moderado, y sus políticas fiscales y monetarias están en condiciones normales”, aseguró Guan, y reiteró que China tiene un amplio espacio para hacer frente a los riesgos tanto nacionales como extranjeros.
"Esa es la razón por la que los inversores confían en los activos denominados en yuanes", afirmó Guan.
Las acciones en la parte continental de China han superado a muchos de los principales mercados extranjeros. El capital extranjero que fluye hacia los mercados continentales a través de Hong Kong, también conocido como "capital hacia el norte" totalizó en junio 73.000 millones de yuanes (10.800 millones de dólares), detalló Founder Securities.
Algunos países también han comenzado a aumentar la participación del yuan en sus reservas de divisas. Bielorrusia fue la última, anunciando este miércoles un plan para incluir el yuan en sus reservas.
Zhou señaló que además del valor del yuan, el uso constante del dólar por parte de Washington como arma para sancionar a otros países es un factor que impulsa a considerar una diversificación de las reservas.
"Son los sólidos fundamentos de China los que respaldan la fe de los inversores en el yuan", concluyó Guan.
(Web editor: Rosa Liu, Zhao Jian)
