BUENOS AIRES, 9 dic (Xinhua) -- El pueblo argentino salió hoy a las calles en gran parte del país para celebrar la angustiosa clasificación a las semifinales del Mundial de fútbol de Catar.
Con goles de Nahuel Molina (35m) y Lionel Messi (72m -penalti-), el elenco albiceleste vencía 2-0 a Países Bajos y se encaminaba a una victoria.
Sin embargo, los dirigidos por Louis van Gaal llegaron al empate en el décimo minuto que adicionó el árbitro español Antonio Mateu Lahoz, mediante un doblete del ingresado Wout Weghorst (83m y 100m).
En el segundo tiempo extra, Argentina recuperó el manejo del balón y generó varias situaciones para quedarse con el triunfo, pero no pudo convertir.
En la tanda de penaltis, el portero Emiliano "Dibu" Martínez se convirtió en figura al detener los dos primeros disparos (Virgil van Dijk y Steven Berghuis).
Para los sudamericanos anotaron Messi, Leandro Paredes y Gonzalo Montiel, tras lo cual Enzo Fernández no pudo sellar la clasificación al estrellar su remate en un poste.
Quien sí pudo fue el delantero Lautaro Martínez, del Inter de Italia, que dejó atrás una sequía goleadora para establecer el 4-3 definitivo y desatar la algarabía de los argentinos.
En la Ciudad de Buenos Aires, los fanáticos salieron a las calles con sus vehículos, haciendo tocar su bocina y con las banderas albicelestes ondeando.
Lo mismo sucedió en gran parte del país, que se vistió de fiesta por lograr una ansiada clasificación a semifinales, donde espera Croacia, vencedor de Brasil en tanda de penaltis (4-2), tras el 1-1 en 120 minutos.
La última vez que había accedido a esta instancia fue en Brasil 2014, cuando venció 1-0 a Bélgica y luego enfrentó a Países Bajos, al que derrotaría también en los penaltis, para perder luego 0-1 con Alemania.
El equipo sudamericano fue campeón en Argentina 1978 y México 1986, por lo que busca coronarse por primera vez con Messi en el plantel, en su quinto mundial consecutivo.
(Web editor: Rosa Liu, Zhao Jian)