China desarrolla su vehículo de lanzamiento tripulado de nueva generación y su nave espacial que satisfarán la necesidad estratégica a largo plazo de exploración lunar tripulada. (Foto: CCTV)
China ha esbozado un nuevo lote de ambiciosos planes para la exploración del espacio profundo, una misión de sonda lunar y vehículos de lanzamiento de próxima generación. El país está en camino de convertirse para el 2045 en una potencia espacial mundial completa. Los planes incluyen el vuelo inaugural del cohete portador tripulado de próxima generación planeado alrededor de 2027, la exploración de planetas habitables fuera del sistema solar alrededor de 2030 y la estructura básica de la Estación Internacional de Investigación Lunar que se construirá para 2028.
Wu Yansheng, presidente del gigante espacial estatal China Aerospace Science and Technology Corp (CASC), reveló que China planea lanzar una sonda de espacio profundo alrededor de 2025 para explorar asteroides cercanos a la Tierra y cometas del cinturón principal, e implementar una misión de recuperación de muestras de Marte en los próximos 10 a 15 años.
China también planea realizar estudios interplanetarios de Júpiter y Urano, así como del sistema solar y sus fronteras, recalcó Wu. Para 2030, se implementará una misión llamada "búsqueda de voces" para explorar si hay planetas fuera del sistema solar adecuados para la vida humana.
Según el CASC, China también está desarrollando un vehículo de lanzamiento tripulado de próxima generación que satisfará la necesidad estratégica a largo plazo de la exploración lunar tripulada. Será un lanzador de tres etapas y media que tiene 90 metros de altura y 5 metros de diámetro, y pesa unas 2.187 toneladas en el lanzamiento.
El lanzador será capaz de enviar cargas útiles de 25 toneladas directamente a la órbita de transferencia lunar (LTO), o cargas útiles de 70 toneladas a la órbita cercana a la Tierra, y se espera que realice un vuelo inaugural para 2027, reveló previamente el CASC al Global Times.
Un nuevo modelo de cohete portador de carga súper pesada, el Gran Marcha-9, también está en desarrollo. Será un mega cohete de tres etapas de 10 metros de diámetro con una altura de 110 metros, capaz de enviar cargas útiles de 150 toneladas a la órbita cercana a la Tierra, 50 toneladas a LTO y 35 toneladas al Mars Transfer Rocket. El primer vuelo del vehículo Gran Marcha-9 podría esperarse alrededor del 2030.
Wu también compartió los últimos avances en la misión de la sonda lunar de la Fase 4 de China. La sonda Chang'e-6, que ha servido como respaldo para la Chang'e-5 con una capacidad de recuperación de muestras, viajará al otro lado de la luna alrededor del 2025.
Chang'e-7 está programado para llevar a cabo estudios ambientales y de recursos del Polo Sur lunar alrededor del 2026.
Uniéndose al Chang'e-7, Chang'e-8 se lanzará alrededor del 2028 para formar una estructura básica para la Estación Internacional de Investigación Lunar.
China también está construyendo una "Internet lunar" que integra funciones de transmisión de datos, navegación y teledetección, con la esperanza de que los futuros astronautas, ingenieros espaciales y científicos enviados a la estación de investigación lunar puedan usar Internet para publicar en las redes sociales tal como lo hacen desde la Tierra.
El país también está considerando naves espaciales reutilizables que se trasladarán entre la Tierra y el espacio con bajos costos, alta confiabilidad y flexibilidad. El transbordador espacial será como los ferrocarriles de alta velocidad y los aviones que operan regularmente.
Para apoyar este plan, se establecerá un sistema de infraestructura espacial, de modo que las naves espaciales puedan realizar el reemplazo, mantenimiento y actualización del equipo en órbita.
"Nuestro objetivo es promover a China entre las principales potencias espaciales del mundo para 2030, y promover el establecimiento integral de China como una potencia espacial mundial fuerte para 2045", concluyó Wu.
(Web editor: Zhao Jian, 周雨)
