Por Zhong Sheng, Diario del Pueblo
La central hidroeléctrica de Baihetan, la segunda mayor del mundo, se ha puesto recientemente en pleno funcionamiento, con lo que China ha completado el mayor corredor de energías limpias del mundo en el río Yangtsé. Durante las vacaciones del Año Nuevo, el mercado de consumo en China se vuelve dinámico y cálido. Desde la costa oriental de Zhejiang y Jiangsu, hasta la central y occidental de Hunan y Sichuan, muchas empresas chinas de comercio exterior han desencadenado una oleada de visitas en grupo a países extranjeros a fin de realizar negociaciones cara a cara.
Con el ajuste de la política china de prevención y control de la epidemia COVID-19, ha aumentado la confianza de las empresas en el mercado y se ha acelerado notablemente el ritmo de producción.
La comunidad internacional es más optimista sobre las perspectivas de desarrollo económico de China, sosteniendo que el ajuste decisivo de su política de prevención y control de la epidemia creará un mejor impulso para la recuperación económica y el crecimiento de China. Instituciones internacionales de inversión como Morgan Stanley, Goldman Sachs y JP Morgan Chase, entre otros, han elevado sus previsiones de crecimiento económico de China para 2023. Una encuesta del Bank of America reveló que la proporción de gestores de fondos que creen que China registrará mayores tasas de crecimiento tras el ajuste de su política antiepidémica se ha disparado hasta cerca de 3/4. La Directora General de la Organización Mundial del Comercio, Ngozi Okonjo-Iweala, afirmó que el ajuste de la política antiepidémica china contribuirá a sostener la economía mundial. El Secretario General de la OCDE, Mathias Cormann, afirmó que el ajuste de la política china contra el COVID-19 "respaldará la fortaleza de la recuperación en China, y en todo el mundo".
Sin embargo, algunos medios de comunicación occidentales no sólo han ignorado los cambios positivos de la economía china y los juicios autorizados de organizaciones económicas e instituciones empresariales internacionales, sino que han vertido sin ningún fundamento su pesimismo sobre la economía china. Cuando China insistió en "Covid Cero" de forma dinámica, estos medios hicieron afirmaciones infundadas sobre el impacto negativo de la política antiepidémica china en la economía mundial, y cuando China tomó la iniciativa de optimizar sus medidas antiepidémicas según la situación, estos medios hicieron las mismas afirmaciones. Tales contradicciones revelan su arraigada parcialidad política en su visión de China, y también su siniestra intención de temer lo mejor para China.
El aspecto más crucial para hacer frente a la epidemia del siglo es cómo proteger las vidas y la seguridad, así como la economía y los medios de subsistencia de las personas. Desde el brote de la epidemia, China siempre ha sido proactiva, ha tomado la iniciativa, ha librado la batalla de la certeza con estrategias flexibles de prevención y control y un despliegue y una preparación adecuados, ha respondido eficazmente al impacto de cinco oleadas de epidemias mundiales, ha gestionado eficazmente más de 100 epidemias agregadas en China y ha salvaguardado eficazmente la salud y la seguridad de las personas y el desarrollo económico y social. La economía china ha crecido a un ritmo medio anual de alrededor del 4,5% en los últimos tres años, bastante más que la media mundial. El papel activo de China también ha contribuido de forma importante a garantizar la estabilidad y fluidez de la cadena global de suministro industrial y a promover el desarrollo de la economía mundial. La práctica ha demostrado que China ha desarrollado un camino dialéctico para coordinar eficazmente la prevención y el control de epidemias con el desarrollo económico y social, lo que no sólo ha maximizado la protección de la vida y la salud de las personas, sino que también ha minimizado el impacto de la epidemia en el desarrollo económico y social.
La Conferencia Central de Trabajo Económico, celebrada recientemente, propuso claramente "seis coordinaciones", incluida una mejor coordinación entre la prevención y el control de epidemias y el desarrollo económico y social. China ha optimizado y mejorado sus políticas de prevención y control en respuesta a la situación, y ha realizado ajustes en sus estrategias de prevención y control basándose en una evaluación exhaustiva de la variación del virus, la situación de la epidemia y el trabajo de prevención y control, lo que ayudará a mejorar el carácter científico, preciso y eficaz del trabajo de prevención y control, ayudará a proteger mejor la producción normal, la vida y las necesidades médicas y sanitarias, y ayudará a minimizar el impacto de la epidemia en el desarrollo económico y social. En consecuencia, el gobierno chino ha formulado y promulgado medidas temporales para la circulación del personal chino y extranjero, que crearán mejores condiciones para la circulación segura, saludable y ordenada del personal chino y extranjero, salvaguardarán mejor los intercambios y la cooperación con el extranjero y aportarán más beneficios al desarrollo económico global.
Desde el estallido de la epidemia, la comunidad internacional tiene ante sí la urgente tarea de reforzar la coordinación de las políticas macroeconómicas y promover conjuntamente la recuperación y el crecimiento de la economía mundial. Sin embargo, algunos países importantes que tienen un impacto significativo en la economía mundial han actuado sin ningún sentido de la responsabilidad. No sólo han subido repetidamente los tipos de interés para trasladar la presión inflacionista al mundo por sus propios intereses egoístas, sino que también han insistido en "desacoplar" y “romper cadenas”, y en aplicar sanciones extremas en detrimento de otros, añadiendo continuamente riesgos a la economía mundial. Algunos medios de comunicación occidentales ignoran los factores positivos que ha aportado a la economía china y a la economía mundial el ajuste de la política antiepidémica de China, y especulan deliberadamente con argumentos negativos y absurdos sobre la economía china, que en modo ninguno cambiarán la confianza de la comunidad internacional en el desarrollo económico de China, ni pueden detener la tendencia a reforzar la cooperación con China, beneficiosa para todos.
La China actual es una China vibrante y dinámica. La economía china es resistente, con gran potencial y vitalidad, y sus fundamentos positivos a largo plazo permanecen inalterados. El pueblo chino confía en poder superar la epidemia, promover un nuevo desarrollo económico y social, y seguir contribuyendo con energía positiva al crecimiento fuerte, sostenible, equilibrado e inclusivo de la economía mundial.
(Web editor: Zhao Jian, 周雨)