Festival de Primavera en la calle Qianmen, Beijing. (Foto: IC)
Desde noviembre del 2022, China ha logrado una victoria importante y decisiva en su prevención y control del COVID-19, creando el milagro del país más poblado en la historia de la civilización humana para salir con éxito de la pandemia, y el ajuste y la optimización de la política COVID-19 del país ayudaron a lograr una transición estable y mantener la tasa de mortalidad general en el nivel más bajo del mundo, afirmó este jueves la máxima dirección china.
Una reunión del Comité Permanente del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) presidida por Xi Jinping, secretario general del Comité Central del PCCh, señaló este jueves que en los últimos tres años el procedimiento de prevención de epidemias de China ha sido extraordinario. El país optimizó y ajustó las medidas de prevención y control de epidemias de acuerdo con las circunstancias, coordinando eficazmente la prevención y el control con el desarrollo económico y social.
En la reunión se aseguró que “la respuesta al COVID-19 en China nos ayudó a evitar con éxito la prevalencia generalizada de cepas virales más virulentas y altamente letales, proteger eficazmente la seguridad y la salud del público y ganar tiempo previo para ganar la batalla”.
La gestión optimizada desde noviembre del 2022 de COVID-19 en el país ha logrado una transición sin problemas del trabajo antiepidémico, con más de 200 millones de personas recibiendo tratamiento, 800.000 casos graves tratados de manera efectiva y una tasa de mortalidad por COVID-19 que se ha mantenido en el nivel más bajo del mundo.
La práctica demostró que el juicio principal y la decisión política del PCCh sobre la lucha contra el COVID-19 son totalmente correctas. Esas medidas han sido reconocidas plenamente por el pueblo chino y su logro es enorme, se aseveró en la reunión.
Algunos expertos chinos creen que la declaración también marcó que el país ha salido de la pandemia y que la epidemia se está convirtiendo en una endémica. A medida que el país más poblado ahora es testigo de cómo su sociedad vuelve a la normalidad con actividades económicas que se recuperan rápidamente, la perspectiva de que el mundo vea la pandemia terminada "está a la vista".
"Después de experimentar las olas de infección en diciembre y enero, la sociedad china ha vuelto a la normalidad y la gente ha salido del estado de pandemia, lo que también está en línea con las expectativas del público", indicó el jueves al Global Times un experto cercano al Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades, que prefirió no ser identificado.
También significa que hemos comenzado un proceso en el que la enfermedad se convirtió en una enfermedad de infección respiratoria común que no provocará una atención pública adicional y la gente la tomará con un sentido de normalidad, dijo el experto. "Marca que hemos entrado en el proceso endémico".
Victoria decisiva
Funcionarios y expertos en salud chinos dijeron recientemente que la situación nacional de COVID-19 en general se ha estabilizado. Aunque es poco probable que ocurra una nueva ola de infecciones masivas en los próximos meses, las escuelas y las áreas rurales serán la próxima prioridad para el control de la epidemia.
En los últimos tres años, en respuesta a la situación constantemente cambiante de la epidemia, China ha emitido 10 ediciones de protocolos de control de COVID-19 y ha evitado la propagación a gran escala de la cepa original y la cepa Delta con una fuerte patogenicidad, reduciendo las muertes y las enfermedades graves por COVID-19.
En comparación con hace tres años, la patogenicidad de la cepa Ómicron se ha debilitado significativamente. "Tenemos más conocimiento del virus y más tipos de medicamentos antivirales, así como experiencia en el tratamiento de COVID-19 con medicina tradicional china y medicina occidental", resaltó Wu Zunyou, epidemiólogo jefe de los Centros Chinos para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de China, en una conferencia de prensa reciente.
“Solo existe una posibilidad insignificante de que surja una nueva ola de infecciones epidémicas de COVID-19 en los próximos meses en China, ya que la inmunidad de la población se mantiene en un nivel alto”, insistió Wu.
“Hemos resistido con éxito la ola de salida masiva antes de las vacaciones del Festival de la Primavera, y a pesar de que muchos temían que la infección pudiera repuntar después del festival, no lo hizo”, remarcó Li Tongzeng, director del Departamento de Infecciones del Hospital Youan de Beijing.
"Tampoco vimos la aparición de variantes nuevas y más peligrosas; también el caso de pacientes con síntomas graves y casos de muerte está disminuyendo", dijo Li, señalando que el país también adquirió una robusta inmunidad híbrida generada por la infección natural y la vacunación en los últimos meses, por lo que es poco probable que ocurra otro brote en el futuro cercano.
El miércoles, los CDC de China publicaron la última situación de la infección por COVID-19, indicando que el número de muertes hospitalarias se redujo este lunes a 9 fallecidos, un 99,8 por ciento menos que el pico. Desde el 9 de diciembre del 2022, el número de casos positivos reportados ha aumentado y luego ha seguido disminuyendo, alcanzando el 22 de diciembre el pico de 6,94 millones y cayendo este lunes a 8.847 reportados.
Lu cree que la vacunación efectiva y el uso oportuno de medicamentos antivirales serían factores clave para prevenir casos graves y reducir la tasa de mortalidad.
Según los CDC de China, desde el 8 de diciembre hasta el 9 de febrero ha habido más de 83.000 muertes relacionadas con COVID-19 en hospitales en la parte continental de China, pero el número de muertes y casos positivos ha disminuido este año.
Aunque la situación general de prevención y control de epidemias ha ido mejorando, dado que la pandemia mundial aún está en curso, todos los lugares y departamentos deben resumir las experiencias de tres años e implementar el control de la epidemia en la nueva fase para consolidar aún más el resultado ganado con tanto esfuerzo.
La reunión también requirió fortalecer la creación de capacidad para el monitoreo de epidemias y la alerta temprana regular, mejorar el sistema de monitoreo de epidemias y el sistema de presentación de información, hacer una alerta temprana oportuna y precisa mientras se planifica el trabajo de vacunación de la próxima fase para aumentar la tasa de vacunación entre los ancianos.
(Web editor: Rosa Liu, Zhao Jian)
